Para el resto del mundo, el Mundial de Qatar se terminó el 18 de diciembre. Para Argentina recién el martes por la noche, cuando la goleada sobre Curazao en Santiago del Estero clausuró la agenda de festejos por la obtención de “la tercera”. Ahora sí, es tiempo de dejar de mirar hacia atrás y enfocarse en todo lo que viene para esta Selección en los años hacia la defensa del título en 2026.
1- Los próximos amistosos: los jugadores regresaron a Europa inmediatamente después del partido en el “Madre de Ciudades”. La próxima reunión de la Selección será en la fecha FIFA de junio, en la que jugará otros dos amistosos con rivales a confirmar. Se habla de una gira por Asia, en la que podría tener lugar el esperado amistoso con Bangladesh, país que mostró un insólito fervor por la Selección y por Lionel Messi antes y durante el Mundial, al punto de convencer a la Cancillería argentina de reabrir la embajada bangladesí en Buenos Aires. Japón y China también suenan como posibles rivales.
2- Las Eliminatorias: después del Mundial de Corea-Japón 2002, los únicos clasificados de antemano son los países anfitriones. No así el campeón defensor, por lo que Argentina deberá jugar Eliminatorias como cualquier otro. Cabe recordar que el próximo Mundial pasará de 32 a 48 seleccionados, por lo que a Sudamérica le corresponderán seis plazas en lugar de las cuatro (más un repechaje) actuales. El primer partido oficial de la Selección será en septiembre (las fechas aún no fueron confirmadas), cuando debute en las Eliminatorias recibiendo a Ecuador. Días después visitará a Bolivia. En octubre se medirá con Paraguay y Perú, y en noviembre cerrará el año con dos clásicos: de local ante Uruguay y de visitante con Brasil.
3- Copa América: antes de 2026, Argentina deberá revalidar su condición de campeón continental en 2024, también en Estados Unidos. La edición número 48 del torneo de selecciones de fútbol más antiguo del mundo comenzará el 13 de junio y volverá a contar con 16 selecciones, al igual que la de 2016: a los 10 sudamericanos se les sumarán seis clasificados de la Liga de las Naciones de la Concacaf.
4- La continuidad de Lionel Messi: el capitán ya ganó todo con la Selección, y aunque dijo públicamente que no se ve llegando a 2026, nadie pierde la esperanza de verlo convertirse en el primer futbolista de la historia en jugar seis Mundiales. Un punto clave en ese sentido será el nivel de competencia que maneje en los próximos años, y buena parte de ese futuro se definirá en los próximos dos meses. Cada vez parece más difícil que “Leo” siga en PSG después de junio, pero tampoco hay alternativas concretas por ahora. Entre los petrodólares del fútbol árabe y la comodidad de la MLS aparece una posible vuelta a Barcelona. En España hay quienes aseguran que en los últimos días el propio Lionel le pidió a su padre negociar el regreso. En medio de tanta incertidumbre, la única certeza parece ser que, sea donde sea que juegue, Messi estará en 2026 si él así lo quiere.
5- La vieja guardia: por la vigencia que mostró en Qatar, no es una locura pensar en Messi jugando el próximo Mundial con 39 años. Pero sólo él, porque es un extraterrestre. Distinto es el caso de Ángel Di María, Nicolás Otamendi y Alejandro Gómez (los tres tienen 35), quienes a lo sumo se estirarían hasta la próxima Copa América. También está descartado Franco Armani, que hoy tiene 36 y ni siquiera es titular. Marcos Acuña, Germán Pezzella (ambos de 31) y Nicolás Tagliafico tienen margen para llegar a 2026, aunque más ajustado.
6- La nueva generación: la lista de convocados para los amistosos contra Panamá y Curazao incluyó varias jóvenes figuras que seguramente tendrán un lugar en el próximo plantel mundialista. El más conocido es Alejandro Garnacho, el nuevo chico maravilla de Manchester United, pero también están Máximo Perrone (Manchester City) y Facundo Buonanotte (Brighton). A ellos se suman otros como Matías Soulé (Juventus) y Nicolás Paz (Real Madrid).
7- El método de trabajo: aunque tras la triple conquista (Copa América, Finalísima y Mundial) y el invicto más largo de la historia argentina parecía una obviedad la renovación de Lionel Scaloni al frente de la Selección, la cuestión se dilató más de la cuenta y hasta hubo rumores de fuertes discusiones entre el entrenador y Claudio Tapia que generaron un indeseado suspenso. Finalmente, hubo acuerdo para la continuidad hasta 2026 del flamante ganador del premio FIFA The Best como mejor director técnico del mundo junto a su equipo de trabajo. Sostener la confianza en el proyecto fue la clave para pasar de las dudas al éxito, y renovarla era ya una cuestión fundamental y de coherencia. El desafío de Scaloni y su staff de aquí en más será aggiornar el gran equipo que lograron construir.
8- Juveniles: los pibes son el futuro de la Selección. En ese sentido, el trabajo de Scaloni y su equipo se complementa necesariamente con el de los entrenadores del Sub-17 (Diego Placente) y del Sub-20. Este último quedó acéfalo tras la renuncia de Javier Mascherano a causa del pésimo Sudamericano, en el que Argentina quedó afuera del Mundial. Sin embargo, a pesar de las críticas, Scaloni elogió públicamente el desempeño del ex volante central de la Selección y le pidió que reconsidere su decisión, por lo que Mascherano podría dar marcha atrás con la renuncia.
9- La organización del Mundial 2030: si bien se trata de una misión dirigencial, los jugadores de la Selección serán las caras visibles de la campaña argentina para la organización del Mundial 2030 en forma conjunta con Paraguay, Uruguay y Chile. De hecho, ya en Santiago el plantel salió a la cancha con remeras blancas que tenían estampado el logo de “Juntos 2030”.