La ola de calor no da tregua en Argentina a un día del inicio del otoño. Ya son varias semanas de temperaturas por encima de los 30° y aunque en algunas provincias se hizo presente la lluvia, la alerta roja sigue vigente. En algunos lugares, las máximas superaron los 41°.
Si bien los efectos del calentamiento global pueden ser parte de este escenario al rojo vivo, esta ola de calor se trata de un fenómeno extraordinario.
“Esta ola de calor que se inició en el centro de la Argentina el 28 de febrero tiene sus razones, básicamente por lo que los climatólogos llamamos un bloqueo atmosférico que no es otra cosa que una alta presión o un anticiclón en el Océano Atlántico estancado por decirlo de alguna manera. Esto hace que el aire del Norte sea mucho más caluroso y húmedo, llegue y se estanque, entre comillas, en la zona central de la Argentina, no dejando además que los frentes fríos que vienen del Sur o del sudoeste, lleguen a esta región a cambiar las temperaturas”, explica el climatólogo Alfredo “Alpio” Costa a Infobae.
Ola de calor: por que perdura tanto tiempo
Según Costa, probablemente se haya sostenido tanto en el tiempo por que este bloqueo atmosférico no dejó de actuar y este anticiclón en el Océano Atlántico sirve justamente de bloqueo para el frente frío que vienen del Sur y el sudoeste.
"Al no correrse, al no moverse, al no seguir la dinámica habitual de los ciclones y los anticiclones, se produce este bloqueo, lo que genera lo que estamos viviendo ahora en la Argentina", agrega el especialista.
Recomendaciones a tener en cuenta para sobrevivir al calor sofocante
Ante este tipo de fenómenos climáticos, desde el Ministerio de Salud de la Nación recomiendan una serie de cuidados para que las personas no sufran tanto las altas temperaturas. Entre ellos se destacan:
- Aumentar el consumo de agua sin esperar a tener sed para mantener una hidratación adecuada.
- No exponerse al sol en exceso, ni en horas centrales del día (entre las 10 y las 16 horas)
- Prestar atención a los bebés, niños y niñas y a las personas mayores.
- Evitar las bebidas con cafeína, con alcohol o muy azucaradas.
- Evitar comidas muy abundantes.
- Ingerir verduras y frutas.
- Reducir la actividad física.
- Usar ropa ligera, holgada y de colores claros; sombrero, anteojos oscuros.
- Permanecer en espacios ventilados o acondicionados.
- Recordar que no existe un tratamiento farmacológico contra el golpe de calor y sólo los métodos clásicos, citados arriba, pueden prevenirlo y contrarrestarlo.