Mateo Coronel llegó al “decano” en silencio, pero gracias a un gol de 70 metros pronto estuvo en boca de todos. A partir de allí el delantero se metió en aquel equipo titular de Lucas Pusineri que se ilusionó con ser campeón y ahora, luego de un arranque algo irregular, su nivel comenzó a ilusionar otra vez a los hinchas. Desde la intimidad de su casa en Yerba Buena, y en la previa del partido con Barracas Central, Coronel charló con LA GACETA.
- ¿Quién es Mateo?
- Un chico sencillo y trabajador al que las cosas siempre le costaron. Todo lo que tiene se lo ganó con mucho esfuerzo y sacrificio desde hace muchos años. Tiene una compañera al lado que lo apoya en todo momento, eso es fundamental. Ese soy yo, un chico simple. Intento superarme día a día, tengo mucho para crecer, estoy en la búsqueda de ser un jugador cada vez más completo.
- ¿Y si no eras jugador?
- No sé. No me gusta estudiar, así que probablemente iba a ser albañil, seguro iba a estar trabajando ahora con mi papá y con mi abuelo. Mi hermano (Franco) es jugador de fútbol (Racing de Córdoba), mi hermana (Emilia) tiene el don del canto. Yo nací para jugar con la pelotita. Igual ahora estoy terminando el secundario, es una cuenta pendiente que tenía.
- ¿Cuándo te separaste de ellos?
-A lo 16 me fui a Newell’s, estaba a una hora de Ramallo, pero me independicé. Después me fui a Buenos Aires, ahí estaba más lejos, pero los veía mucho más que ahora. A ellos se les complica venir, estamos lejos y no tienen medio de movilidad. Aprovecho las vacaciones o si tenemos días libres para poder disfrutar de ellos. Ahí, mi pareja (Sara) juega un papel importante. Hace cinco años caminamos juntos y soy muy agradecido de tenerla, me banca en todas.
- ¿Qué haces en tu tiempo libre?
- Soy tranquilo, no me gusta ir de aquí para allá, soy de estar mucho en la casa, sólo salgo a entrenarme. Veo series con mi novia, me gustan las de acción y a ella las románticas, vamos intercalando. Me gusta ir al parque Guillermina con Milo (su perro) o juego al FIFA o al Call of Duty con Joaquín (Pereyra) y Fran (Di Franco).
- El plantel es muy unido...
- Estamos generalmente todo el día juntos. Además del entrenamiento compartimos juntadas, asados. Somos como una gran familia, lo que pasó con Andrés Balanta creo que nos unió mucho más.
- ¿Ya superaron esa pérdida?
- No. Fue algo muy feo y creo que depende de cada uno el tiempo que nos demande. Él no era mi amigo de toda la vida, pero compartimos muchísimo en seis meses. Era una persona muy buena, alegre, un chico joven. Toda esa situación te hace tambalear. Te hace replantear muchas cosas. Seguimos intentando sacar esto adelante, en las primeras fechas inconscientemente nos pesaba dentro de la cancha. Ahora me siento un poco más tranquilo, ganar ese primer partido fue un desahogo.
- Le dedicaron el triunfo ante Banfield a él...
- Sí. Se lo merecía. Igual no fue nada planeado. Yo cuando entré a la cancha vi la remera, no sabía de quién era y cuando ganamos sabía que me iban a hacer una nota, entonces la pedí. Quería hablar, no por mí, en representación de todos mis compañeros por lo que significaba Andrés para el grupo. La remera la tenía preparada “‘Pucho” (Ignacio Maestro Puch). Después le pedí disculpas por utilizarla, pero lo entendió. Fue una forma de recordarlo y a la vez, sacarnos todo lo que cargamos adentro de cada uno.
- ¿Los hinchas te piden que te quedes?
- Sí, por todos lados. Me hacen muchos videos, les agradezco a todos. No sé qué pasará en diciembre, el club tiene la opción, si me compran para mí será un orgullo y también un reconocimiento por lo que hago.
- ¿Creés que estás haciendo las cosas bien?
-Desde que llegué creo que estoy en un nivel alto. Con mucho de eso tiene que ver Lucas, porque me da libertades y por eso me animo a hacer cosas que antes no.
- ¿Te reconocen en la calle?
- Sí. Esto es nuevo para mí, todos me dicen cosas muy lindas ahora por los goles, si los erro no sé que me dirán (risas). Aquí sumé los minutos que no pude en Argentinos Juniors y me siento muy feliz por el cariño de los hinchas.
- ¿Te dolió no estar nominado para el premio Puskas?
- No, para nada. Sabía que es difícil que se fijen en un club del interior. Soy feliz con el reconocimiento de los hinchas y por quedar en la historia del club con ese gol, fue el primero con esta camiseta.
- ¿Intentarás hacer otro gol desde mitad de cancha?
- Y ahora viene Barracas y me trae buenos recuerdos (risas). El otro día un defensor de Platense le gritaba a su arquero desde la mitad de la cancha y le decía ‘guarda que le pega de lejos’ y me señalaba. Después se acercó y me dijo: ‘no vas a querer patear desde mitad de cancha’, yo sólo me reía. Todo se estudia en el fútbol de hoy, saben que me gusta probar desde lejos, pero en algún momento se van a distraer.
- ¿Cómo imaginás tu futuro?
- Tengo el sueño de llegar a Europa, todos cuando empezamos esta carrera soñamos con la Selección y con jugar afuera. Yo estoy tranquilo, sé que esos objetivos los puedo conseguir con trabajo, confianza y fe. Ahora me entrego al máximo pensando en Atlético.
- ¿Cómo están para hoy?
- Muy ilusionados con volver a sumar de a tres, en casa queremos volver a hacernos fuertes. Ojalá se dé un lindo partido y que los puntos queden en Tucumán.
Último ensayo, concentración y a esperar
El plantel de Atlético se entrenó ayer por la tarde en el complejo José Salmoiraghi. Luego de la práctica los jugadores quedaron concentrados para el partido de esta noche (21.30) ante Barracas central. La principal duda de Pusineri está en el lateral derecho, donde Renzo Tesuri, Marcelo Ortíz y Moisés Brandán son los candidatos para reemplazar a Hernán De la Fuente. El DT confirmará el equipo en la charla técnica de esta tarde.