Son las 10 de la mañana y el portón principal de ingreso al complejo “Natalio Mirkin” está cerrado. Como ya es una costumbre desde su llegada, Iván Delfino dirige los entrenamientos bajo siete llaves. Quiere que sus jugadores estén concentrados y que no haya miradas indiscretas; y ahora, con el horizonte algo cargado, profundiza esa idea.
La dura derrota sufrida en la Isla Maciel, sumada al inesperado empate agónico de Temperley y a la caída ante Nueva Chicago achicó considerablemente el margen de error en La Ciudadela. El juego de mañana contra Almagro es casi un partido definitorio en el que parece no haber día después. Por eso el entrenador utilizó la semana para hacer hincapié en cada uno de los errores que el equipo viene cometiendo en el último tiempo y en buscar las soluciones debidas.
“Ya pasó el momento más difícil, que fueron las horas posteriores a la caída en San Telmo. Hoy el plantel está mucho mejor, trabajando, enfocado en volver a ganar. Eso permitirá tener más tranquilidad para ir buscando el funcionamiento como equipo”, le comenta a LA GACETA un integrante de la dirigencia, tratando de bajarle los decibeles a un juego que tomó la importancia casi de una final del mundo.
Con Franco Meritello suspendido por una fecha a causa de la expulsión en la cancha de San Telmo, sin Gervasio Núñez (padece un esguince en el tobillo derecho y estará una semana alejado del grupo) y con varios futbolistas que vienen mostrando un bajo rendimiento, Delfino probó y probó variantes durante la práctica matutina.
Hace algunos días le había confiado a sus íntimos que a Darío Sand y a Juan Orellana (ya están recuperados) les faltaban unos días para volver al ruedo. Pero ahora ellos también pasaron a ser opciones. El arquero y el central formaron parte de la práctica de fútbol y, debido a que el DT necesita de todos, están a disposición.
En detalle
“No es momento de hablar, sino de trabajar y buscar soluciones en el campo”. A la frase que hace algunos días hizo pública Alexis Ferrero, el entrenador la puso en práctica. Por eso probó numerosas opciones.
En defensa, Orellana, Nicolás Bazzana y Nahuel Brunet son las opciones que el entrenador maneja para suplantar a Meritello; aunque claro, nadie tiene su lugar asegurado. Mucho menos tras las últimas presentaciones que dejaron demasiadas dudas.
En el ataque, el regreso de Matías Quiroga parece ser una fija. Quiroga está recuperado de la lesión, ya completó varias prácticas de fútbol y Delfino entiende que junto a Emanuel Dening conforman la dupla ideal.
En donde menos certeza hay es en la mitad de la cancha. En los últimos partidos San Martín no tuvo volumen de juego y, para colmo, mucho de sus jugadores mostraron un rendimiento individual demasiado bajo. Federico Bravo y Claudio Pombo fueron los que más participación tuvieron. Pero en ese sector Juan Imbert y Enzo Martínez pasaron a ser opciones para Matías Pardo y Brian Andrada.
Hoy el DT realizará una nueva prueba. Todo sea por encontrar el equipo y el nivel necesario para cortar de raíz el difícil momento.
Desábato no realizaría variantes
Equipo que empata jugando bien no se toca. Eso parece pensar Leandro Desábato, DT de Almagro, quien tendría casi decidido repetir la formación que en la fecha pasada igualó 0 a 0 contra Nueva Chicago. Así, el “tricolor” apelaría a un 4-1-4-1 con: Emiliano González; Nahuel Basualdo, Mauricio Guzmán, Joaquín Varela y Leonardo Ferreyra; Francisco Solé; Gastón Blanc, Andrés Ayala, Alexis Cuello y Alan Schonfeld; Mario Galeano.