Julia Wendell, la joven polaca de 21 años que semanas atrás sostuvo que es Madeleine MacCann, la niña desaparecida en 2007, continúa adelante con su búsqueda de identidad. Instalada ahora en California (Estados Unidos), presentó tres pruebas de ADN y sospecha que en realidad podría ser otra niña raptada.
Mientras Julia pedía realizarse pruebas de ADN con la familia MacCann para confirmar si es o no la niña desaparecida, sus padres adoptivos echaron por tierra su teoría asegurando que ella es una persona que ''necesita ayuda''.
También aseguraron que Julia sabe perfectamente que no es Madeleine, pero que ''haría cualquier cosa por conseguir fama y popularidad''.
Poco después, ella reconoció que no sabía con exactitud que era Madeleine McCann, pero que era una niña secuestrada y que no iba a parar hasta descubrir sus verdaderos orígenes.
Madeleine McCann y sus derivados: otra niña desaparecida en EE.UU.
El asunto no quedó ahí. Ahora, una familia estadounidense se contactó con Wendell porque sospecha que es la hija desaparecida que tanto han buscado, según informa Radar.
No son los primeros que lo hacen, según informa La Vanguardia. “En este momento, hay muchas familias con niños desaparecidos, similares a la edad de Julia, que nos enviarán correos electrónicos porque les encantaría saber dónde están sus seres queridos desaparecidos”, explica la Fia Johansson, la psicóloga, médium y detective privada que ayuda a la supuesta Madeleine McCann.
La representante de la joven polaca pide paciencia. “No queremos revelar el nombre de la niña o su familia porque las cosas van y vienen, y es un momento muy emotivo para todos. Siento que debemos esperar hasta que obtengamos la prueba de ADN porque queremos saber más sobre los antecedentes de Julia”.