14 Marzo 2023
“Realmente espero estar equivocándome, pero la realidad es que estamos muy preocupados con todo esto. Hoy (ayer) al mediodía nos notificaron que se adelantaba para mañana (por hoy) la audiencia por el caso del médico acusado de atacar a su ex esposa y a su hija. Esta audiencia iba a ser el viernes, no es común que estas cosas ocurran”, señaló el abogado Manuel Pedernera, que asiste como querellante a la médica S.L, quien fue atacada a golpes el 12 de febrero. Hoy, según lo anunciado en la carátula de la audiencia virtual, el motivo de la misma sería el de pedir un “arresto domiciliario/prórroga”.
Según la acusación, el 12 de febrero el traumatólogo L.F.A fue hasta la casa de su ex esposa, S.L, para llevarse a los hijos que tiene en común. En ese momento se desató una discusión que se tornó violenta cuando L.F.A tomó de la cabeza a la médica y la golpeó contra una pared.
En ese contexto, la hija de 14 años de ambos intervino lanzándole un vaso de vidrio a su padre para que se detuviera, pero el hombre respondió haciéndole un corte en la mano a la adolescente con uno de los vidrios rotos que dejó el recipiente. Los nombres del acusado y de las víctimas se preservan en respeto por los derechos de los hijos.
En el caso interviene la Unidad Fiscal de Violencia de Género II, a cargo de Gerardo Salas. Hasta el momento L.F.A fue imputado por el delito de “lesiones leves” en perjuicio de ambas víctimas, aunque se aclaró que la calificación legal podía agravarse según lo que determinaran los médicos forenses que debían revisar a las damnificadas. La carátula del debate que se dará hoy adelanta una acusación por el delito de “lesiones graves”.
En la primera audiencia que se hizo por este hecho, la Fiscalía pidió 60 días de prisión preventiva para el acusado. En ese momento la jueza Isabel Méndez entendió que 19 días podían llegar a bastar para realizar la investigación, sin embargo, por los estudios y la cirugía por la que debió pasar S.L, ese plazo no alcanzó. La mujer presentaba fracturas en la órbita, en los malares y maxilares.
Vencido ese plazo, la Fiscalía pidió 10 días más de preventiva para el acusado. La querella cuestionó con dureza que se pidiera un arresto tan escueto. La jueza Isolina Apás Pérez de Nucci, que estuvo a cargo de esa segunda audiencia, hizo lugar a la cautelar aclarando que no podía otorgar más tiempo del que pedía la Fiscalía y considerando que los argumentos de Pedernera tenían fundamentos para considerar que la investigación conllevaría más días.
Hoy Matías Graña será el juez que entenderá en el caso. Al igual que en el caso de Apás Pérez de Nucci, no podrá ordenar una cautelar más gravosa a la que solicite la Fiscalía, y eso es lo que generó preocupación en la querella. “A más de 30 días del hecho ni la madre ni la hija pudieron volver a su vida normal. Insisto, espero estar equivocándome, pero el acusado nunca pasó al penal como pedíamos, es decir que tiene trato preferencial. Si hoy la Fiscalía insiste en la calificación de lesiones leves y pide una domiciliaria, revisaremos la posibilidad de pedir que se aparte a este fiscal de la causa, porque hasta acá entendemos que hay una parcialidad en contra de las víctimas”, concluyó Pedernera.
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