En una jornada de pánico e incertidumbre global a causa de la crisis que generó la caída del Silicon Valley Bank (SVB) en EEUU, los bonos en dólares operan con mayoría de fuertes bajas (algunas llegan hasta el 9,7%) este lunes 13 de marzo, ante lo cual el riesgo país argentino se dispara hasta un máximo en varios meses. Más moderada es la caída de las acciones argentinas en Wall Street, que ceden hasta 4,3%, mientras que el S&P Merval pierde casi 2%.
El sitio especializado Ambito.com, detalla que con una altísima aversión a los activos de riesgo, por las repercusiones que pueda tener en el sistema financiero la quiebra del SVC, los indicadores de tensión de los mercados financieros empezaron a operar con fuerte volatilidad este lunes, lo que hizo replantearse a los inversores las perspectivas de las tasas de interés en Estados Unidos, algo que desencadenó la mayor avalancha de bonos desde al menos 2008.
El banco SVB, centrado en las "startups", se convirtió la semana pasada en la mayor entidad en quebrar desde la crisis financiera de 2008, enviando ondas de choque a los mercados mundiales. Por ello, el presidente estadounidense, Joe Biden, salió a intentar llevar tranquilidar al mercado: dijo que se comprometerá a hacer todo lo necesario frente a la crisis bancaria, cuya quiebra de SVB obligó a los reguladores a intervenir con medidas de emergencia.
Bajo este panorama, los bonos argentinos anotaban, en casos puntuales, bajas de hasta casi 10%, lideradas por el Global 2038 (-9,7%), el Global 2041 (-7,4%) y el Global 2046 (-4,7%). Distinta era la performance de los bonares, que incluso, hasta operaban en alza: el Bonar 2035 ganaba 1%; mientras que el Bonar 2041 subía 0,4%.
En efecto, el riesgo país argentino medido por el banco JP Morgan se disparaba 4,7% a 2.350 puntos básicos, luego de tocar las 2.444 unidades en la apertura del mercado, un nivel no visto desde noviembre pasado.
"El colapso de los bancos Silvergate Capital y Silicon Valley Bank golpeó a los activos de riesgo, de los que los Globales forman parte", señalaron desde StoneX.
Luego de que las autoridades de EEUU intervinieron para limitar las consecuencias de la repentina quiebra del Silicon Valley Bank, se hundieron este lunes en el mercado las expectativas de que la Reserva Federal se muestre agresiva con la política monetaria para frenar la inflación. De hecho, Goldman Sachs dijo que ya no espera que la Reserva Federal suba las tasas en su reunión de la próxima semana.
"El potencial cambio de rumbo de la Fed en la política monetaria podría implicar una leve recuperación para los bonos argentinos", estimó Portfolio Personal Inversiones (PPI). "Por un lado, una disminución en el endurecimiento de la tasa de interés podría generar que los inversores, en busca de mayor rendimiento, incluyan en sus portfolios títulos más riesgosos -de 'beta' elevado- como los argentinos", agregó.
"Por ahora no fue el fin del sistema financiero, ni un nuevo 2008. De hecho, veo muchos más verdes de los esperados. Y eso que tomaron una decisión que no deja feliz a nadie, pues rescataron a depositantes no cubiertos por seguro pero no al banco, su accionistas y acreedores", evaluó el economista de la consultora Ledesma, Gabriel Caamaño.
Al malhumor externo se sumaba el compás de espera impuesto por los inversores que aguardan que el Fondo Monetario Internacional (FMI) anuncie nuevas metas de reservas para el país ante la peor sequía en muchos años, lo que permitirá recibir un desembolso de unos 5.200 millones de dólares. Una fuente cercana a la negociación con el FMI dijo a Reuters en condición de anonimato que el nuevo acuerdo con Argentina "flexibiliza el tema dólares, pero sigue duro en lo que respecto a las metas fiscales".
Serán aprobadas las metas del 2022 al cuarto trimestre, lo que permite el desembolso de fondos frescos, al tiempo que revisa a la baja las metas de reservas 2023 ante una caída en las exportaciones, en tanto que se mantiene la mira del déficit fiscal primario en 1,9% del PIB, comentó.
Por su parte, el Banco Central (BCRA) sigue perdiendo divisas y la oferta del sector agroindustrial está reducida al mínimo. En la semana el BCRA tuvo que enfrentar ventas por 282,5 millones de dólares. Desde la consultora Eco Go sostivieron que "además, el nerviosismo y una situación internacional tampoco fueron soportes para los tipos de cambios financieros". "Ante la imposibilidad de devaluar por las circunstancias políticas (elecciones) y económicas (la inflación se aceleraría desde un nivel ya consolidado de tres dígitos), todos los caminos conducen a un ajuste dramático de las importaciones", estimó PPI.
S&P Merval y ADRs
Mientras tanto, en el segmento de renta variable, el índice líder S&P Merval de BYMA opera con una baja del 1,9% y se ubica en 231.839,17 unidades, liderado por la tendencia impuesta desde papeles de buena liquidez con cotización externa, luego de caer un 3,84% la semana pasada.
"La evolución de la situación de Silicon Valley Bank será determinante. Aunque los futuros hoy se posan entre los verdes (dólares), ya que el mercado descontaría que se llegó a una solución del problema (con FMI)", comentaron desde Portfolio Personal Inversiones (PPI).
El desplome global también condiciona la performance de los papeles de empresas argentinas, que operan con caídas de hasta 4%. Entre los descensos más pronunciados del día, se destacan Despegar (-4,1%); YPF (-3,5%); IRSA (-3,4%); Transportadora Gas del Sur (-3,3%); y Vista (-2,2%).
La incertidumbre financiera global abre un nuevo frente de tormenta para la economía argentina dado que se acentuarán los temores a una retracción que afecte las ya débiles exportaciones del país.