Los investigadores ya tienen la identidad de la acusada. Sólo resta saber qué pasó dentro de las cuatro paredes del departamento donde fue asesinado un hombre de 55 años.
Ayer a la madrugada, una persona, alertada por los ruidos que provenían del domicilio de su vecino, ingresó a la vivienda. Encontró todo revuelto y a Orlando Ponce (55 años) en el suelo. Mientras intentaba saber si el hombre estaba vivo o muerto, una joven salió corriendo del lugar. La testigo avisó a la Policía y en cuestión de minutos la cuadra de 25 de Mayo al 1.400 perdió totalmente la calma.
El fiscal de Homicidios II Ignacio López Bustos se presentó en el lugar. La escena del crimen, según coincidieron fuentes judiciales y policiales, era macabra. A la víctima la habían asesinado a puñaladas -el médico de la fuerza piensa que podrían haber sido al menos dos- y había manchas de sangre por todos lados.
Los pesquisos descubrieron que la sospechosa, después de haber atacado a Ponce, puso ropa ensangrentada en una bolsa y decidió tomarse un baño. Cuando se estaba cambiando, fue descubierta por la persona que ingresó al departamento.
De la sospechosa poco se sabe. Personal de Homicidios, al mando de los comisarios Ramón Moreno, Miguel Carabajal, Diego Bernachi y Jorge Dib, la están buscando en distintas partes de la ciudad.
Hasta el momento, según trascendió, la joven aparece mencionada en una causa de robo. Pero hasta el momento no se pudo determinar qué hacía en el departamento de la víctima y, mucho menos, qué desencadenó el crimen.