11 Marzo 2023
“Si se hace una breve reseña de la historia de la campaña de soja desde la siembra, puede decirse que la ventana de siembra fue muy amplia con lotes sembrados desde fines de noviembre hasta el 25 de enero; y en maíz la ventana fue desde el 15 de diciembre hasta el 2 de febrero, con efectos que originaron el déficit hídrico y las altas temperaturas lo que marca la gran diversidad y variabilidad de estados de lotes que se ven en toda la provincia”, explicó el asesor técnico Oscar Ricci.
Según añadió, la campaña de granos se caracterizó, en general, porque se arriesgó mucho en la siembra, ya que los perfiles eran discontinuos o con un perfil de suelos muy por debajo de lo óptimo. “Y al no tener agua, esta dura menos tiempo y se pierde para abajo y para arriba lo que complica el desarrollo del cultivo”, dijo.
En lo referente a la soja, señaló que pese a lo crítico del año, el desarrollo de la planta mostró mucha eficiencia y se dieron plantas buenas. “Seguramente, debido a la genética y al manejo de los lotes. Sobre todo en aquellos en el que el antecesor fue el maíz, que este año mostró el productor está haciendo mejor las cosas”, explicó. Dijo que la última lluvia ayudó, pero que hay que ver de ahora en más.
Respecto de las malezas, puntualizó que hay mucho uso de herbicidas residuales y graminicidas; pero que al haber poco aporte hídrico se vieron lotes en los cuales faltó que el agroquímico actuara mejor.
En lo referente a plagas, la oruga medidora y bolillera no preocuparon, a raíz de la tendencia que hubo con una menor presión de los insectos. “Sí se ve un incremento de arañuela y trips; y en cuanto al ‘picudo’, se ve poca presión por la rotación del maíz porque el suelo estuvo seco. Es importante que se continúe, sin embargo, con los monitoreos”, aconsejó.
Enfermedades
En cuanto a enfermedades, dijo que todavía no se vio nada importante, por lo que todavía no preocupan.
“En el área cañera, donde se realiza rotaciones con la soja, los cultivos están mejor que en el área típica de producción de granos, ya que en la franja central y piedemonte los aporte hídricos fueron mejores”, manifestó.
En cuanto al maíz, explicó que en lo que tiene que ver con malezas, plagas y enfermedades se ve una situación similar a la soja: “el mal clima ayudo a que haya menos presión de ellas”.
“En general podemos decir que no debemos hablar todavía de rendimientos. Sí hay pérdidas importantes por todo lo dicho, pero deberíamos esperar para dar valores precisos”, cerró.
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