Otro fracaso de la busca de la unidad en Juntos por el Cambio

Ni Germán Alfaro ni Roberto Sánchez cedieron en sus posturas y Juntos por el Cambio volvió a dar un paso en falso en Tucumán. Ayer, durante casi tres horas, intentaron en vano conciliar las aspiraciones electorales y se retiraron más distanciados de lo que llegaron al mitin.

Que ayer se haya dado esta reunión no es casual. A las 20 venció el plazo para inscribir frentes y alianzas electorales con vistas a los comicios del 14 de mayo. Al cónclave llegaron con dos coaliciones ya inscriptas y con la intención quedarse todos dentro de una. Pero se fueron con tres, porque el macrismo anotó su propia alianza minutos antes del cierre del plazo. Se llama Compromiso PRO Tucumán y la integra también el partido del concejal de Yerba Buena José Macome (Compromiso Tucumán). Como desmembramiento de JxC, esta coalición se suma a Juntos por el Cambio, anotada por la UCR y Propuesta Ciudadana; y a la alianza Juntos para Cambiar Tucumán, de los partidos alfaristas De las Ciudades en Acción y Compromiso Ciudadano Independiente. La intención es disputar cargos legislativos y ejecutivos municipales.

En rigor, la reunión se terminó cuando el intendente de San Miguel de Tucumán, poco antes de las 18, se levantó de su silla y abandonó el salón del ex Abasto. Luego departieron durante algunos minutos más los interventores del PRO, Pablo Walter y Marcelo Wechsler; y los referentes del radicalismo que habían asistido al convite. Además del diputado Sánchez, estuvieron los intendentes Mariano Campero (Yerba Buena) y el ex senador José Cano, entre otros.

No hubo posibilidades de acuerdo porque tanto Sánchez como Alfaro se mantuvieron en sus libretos y rechazaron las propuestas. El primero en mostrar las cartas fue el presidente de la UCR: dijo que quien aceptaba ir como vicegobernador, tomaba la intendencia. En rigor, es la vieja idea que sostiene el concepcionense. El plan A consiste en presentar un binomio Sánchez-Alfaro y que el intendente (Alfaro) mantenga la prioridad para elegir al candidato a su sucesión en San Miguel de Tucumán. El plan B apunta a que si Alfaro decide encabezar la fórmula opositora, deberá ceder la definición del postulante a la Intendencia al radicalismo.

Wechsler, coapoderado del PRO, preguntó si ese acuerdo también era extensivo al resto de los municipios, o si sólo se circunscribía a la Capital. Luego de algunas discusiones, Alfaro hizo un par de contrapropuestas. El jefe municipal propuso nuevamente encuestas para definir la fórmula de JxC y todos los candidatos a intendente. Ante el rechazo a esa idea, planteó que la definición por sondeos se limite al binomio gubernamental y al postulante a la intendencia de la Capital. “Explíquenme por qué yo no puedo quedarme con la Municipalidad y sí el resto de los intendentes”, cuentan que, en otras palabras, preguntó sobre la mesa Alfaro.

La respuesta a ese interrogante tiene su basamento en los inicios de la alianza opositora en Tucumán, según los radicales. Adujeron que esa alternativa ya se usó en 2015 y en 2019, cuando Alfaro se quedó con la Intendencia capitalina y las fórmulas fueron encabezadas por referentes de la UCR. Además, insistieron, en las PASO de 2021 los candidatos del radicalismo duplicaron en votos a la nómina alfarista en San Miguel de Tucumán. Sin mucho margen de negociación, la reunión quedó trunca. Luego, tanto Sánchez como Alfaro se limitaron a responder escuetamente sobre el tenor del cónclave. El radical afirmó que aún espera que haya entendimiento. “Hemos hecho una propuesta y esperamos la respuesta para avanzar. Queremos la mejor fórmula para ganar y apostamos al consenso”, insistió. A su vez, el jefe municipal deslizó algunas críticas, pero apostó a la unidad de la oposición. “Las instituciones no se canjean ni se arreglan a espaldas de la gente. Yo planteé varias propuestas, todas abiertas y democráticas para postular a los mejores hombres y mujeres en todos los cargos. Que sea la mejor opción para los tucumanos. La gente es la que debe elegir”, remarcó Alfaro. Y cerró: “Sigo abierto al diálogo y a la unidad”.

¿Se ha terminado la chance de que Sánchez y Alfaro compartan una boleta electoral el 14 de mayo? En rigor, aún no. Ocurre que anoche venció el plazo para inscribir alianzas, pero el calendario les permite todavía mantener conversaciones para determinar las candidaturas y utilizar alguno de los sellos ya registrados. La próxima posta en la carrera de Juntos por el Cambio por no romperse será el martes 14 de marzo. Ese día vence el plazo para que las distintas agrupaciones políticas realicen las elecciones internas cerradas que definirán sus candidatos. Luego, hasta el 12 de abril, se podrán oficializar las postulaciones ante la Junta Electoral Provincial y firmar los acuerdos de acoples.

Cinco frentes

Frente de Izquierda y de los Trabajadores, que integran el Movimiento Socialista de los Trabajadores, el PTS y el Partido Obrero.

Compromiso PRO Tucumán, que conforman el PRO y Compromiso Tucumán.

Juntos por el Cambio, anotado por la UCR y por Propuesta Ciudadana.

Juntos para Cambiar Tucumán, de los partidos de las Ciudades en Acción y Compromiso Ciudadano Independiente.

Frente de Todos por Tucumán, del Partido Justicia y Encuentro por la Renovación.