Cinco claves del canje de deuda que propone el gobierno

Cinco claves del canje de deuda que propone el gobierno

El mercado espera el anuncio oficial del canje de la deuda que hará el Ministerio de Economía y que genera ruido entre oficialismo y oposición.

Cinco claves del canje de deuda que propone el gobierno
06 Marzo 2023

El mercado espera el anuncio oficial del canje de la deuda que hará el Ministerio de Economía y que genera ruido entre oficialismo y oposición.

Acá te dejamos las cinco claves del problema, según el sitio especializado Ambito.com.



Todos están atentos al canje de deuda que anunciará el Gobierno.


Clave 1: La necesidad de dar cobertura y estirar plazos

En el segundo y tercer trimestre hay vencimientos masivos de deuda en pesos y al Gobierno le está costando estirar plazos de cara al cambio de administración que se dará a partir de 2024. Hay un problema de liquidez de fondo porque muchos vencimientos en poco tiempo.

Como no es deseable generar un default en el mercado de deuda local, el Gobierno busca preservar para la próxima gestión el mercado de deuda en un contexto en el que el endeudamiento internacional no es viable. Así, en el medio de un proceso de elecciones presidenciales, lo que busca el Gobierno es realizar un canje por bonos que protegen contra la inflación,  atados al tipo de cambio oficial.

El problema, según advierte a Ambito.com el economista Federico Glustein es que la indexación de los vencimientos le explotará al próximo gobierno, dado que “se espera un 95% mínimo para este año y, si hay perspectiva de un plan antiinflacionario, se dificulta que se vaya a hacer con esa masa de pesos excedente en 2024 y 2025”. Esta es la clave de la polémica que se genera entre oposición y oficialismo por estas horas.

Clave 2: la oferta que haga el Gobierno

Ignacio Zorzoli, director de Finanzas del Centro de Estudios Económicos Argentina XXI (CEEAXXI), apunta en esa línea, que “el canje de deuda busca estirar los plazos de vencimiento de las letras de corto, que finalizan en marzo, abril, mayo y junio”. A cambio de la entrega de esos instrumentos a tasa de descuento o indexados o bonos duales con vencimientos en 2024 y 2025.

“De poder llevarse adelante el canje de manera exitosa, esto tendría dos ventajas relevantes para el gobierno. En primer lugar, podría rollear el plazo de deuda y extenderlo en el tiempo y, lo que es más importante, es que los vencimientos los colocaría en fechas posteriores a las elecciones”, sostiene Zorzoli.

Y, en ese sentido, el economista Federico Glustein explica que “los nuevos bonos pactados con los bancos son de vencimiento escalonado entre 2024 y 2025 -en su mayoría para el segundo año-, un 80% atados a inflación (CER) y un 20% duales con cobertura del tipo de cambio oficial. “El monto total de la deuda que vence en 2023 es de $12,3 billones”, indica.

Por otra parte, menciona que “más de la mitad de los bonos a canjear son posesión de sectores públicos, por los que, si bien se van a adherir en su totalidad, hay que hacer un decreto para que eso suceda”.

Así, plantea que la clave son los meses que van de abril a septiembre, donde se junta gran parte del grueso de los vencimientos. “El tema es que sólo el 20% de los privados como mínimo tiene que entrar al canje, por ende, no peligra en absoluto”, aclara. Pero reconoce que sí es bueno ver qué nivel de aceptación tiene para leer expectativas acerca del futuro corto plazo que tiene el mercado, así como para comenzar a tener lineamientos de los próximos meses y una eventual tranquilidad en el panorama monetario.

Clave 3: el rol de los bancos

Tal como sostiene el economista de Invecq, Juan Pablo Albornoz, aún es difícil hacer un análisis muy detallado ya que, “por ahora, solo se conoce el anuncio del 'anuncio de lo que van a anunciar'”. Y, en esa línea, Sigaut Gtravina asegura que “la gran duda por estas horas es el tema del put con los bancos, si es algo nuevo o algo que ya estaba vigente en la normativa del BCRA y señala que habá que esperar a ver qué precisiones se darán hoy”.

Tal como indica Glustein, la reunión de Massa con los bancos, financieras y aseguradoras es clave para poder salvar un virtual reperfilamiento. Albornoz comenta que, desde la semana pasada ya se observa una mayor demanda por títulos con vencimiento en 2024, lo que comprimió bastante los rendimientos (subieron de precio y paridad).

Clave 4: los riesgos del endeudamiento en pesos

En ese sentido, Camilo Tiscornia, director de CyT Asesores Económicos, opina que “el Gobierno actual ha contraído mucha deuda en pesos y eso implica un potencial de inflación y riesgos de devaluación muy importantes.

Esto porque “es una deuda que se debe pagar en muy corto plazo y eso es lo riesgoso de esta deuda y por eso salen a decir muchos que es ‘una bomba’”. Observa que, lo que hay detrás es un desequilibrio fiscal de fondo y ese es un problema que la Argentina arrastra desde hace años.

“Este problema de endeudamiento genera muchos problemas macroeconómicos y el gran dilema es que las dos facciones de la política actual no se ponen de acuerdo en cómo resolver la cuestión”, dice Tiscornia.

Clave 5: la pata política

En ese sentido, Tiscornia señala que, una solución para el problema real que hay detrás de la deuda argentina es que “el Congreso debería ponerse de acuerdo en fijar una política de Estado que permitiera una mejor aceptación de los títulos de deuda en el mercado y la hiciera más sólida, sustentable y fuerte a futuro”.

Sucede que, tal como sostiene Rodríguez, “el peor escenario es jugar a que se rompa todo, le toque a quien le toque”. Y explica que una situación de ese estilo involucraría la destrucción de ahorros, que “no son ni más ni menos que liquidez excedente invertida en bonos que luego muchas empresas, provincias e instituciones necesitan para atender normalmente sus obligaciones”.

Así, considera que la oposición y el oficialismo (que tienen la mayor responsabilidad) deberían “madurar y cooperar en discutir las mejores herramientas para acelerar un escenario de convergencia fiscal para de esa forma hacer que el mercado de deuda recobre confianza y encuentre un sendero normal para distribuir los vencimientos de una deuda que es manejable, pero que es una bola de nieve de corto plazo, muy peligrosa en un año de transición electoral”.



Tamaño texto
Comentarios
Comentarios