Tucumán no será nunca Rosario por una sola razón: no tiene puerto. Lo que ocurre en esa ciudad no se vive en nuestras calles, pero podría vivirse. A lo largo de los últimos años se encendieron algunas alarmas que, si no son atendidas, ambas realidades podrían unirse. Estas son algunas de ellas:
Ley.- Santa Fe fue una de las primeras provincias en hacerse cargo del microtráfico de droga. Todo el entusiasmo en luchar contra el narcumenudeo desapareció ante la falta del prometido apoyo del Gobierno Nacional. En nuestra provincia, la ley se puso en vigencia y la única ayuda que garantizó el PEN no se cumplió. No hay quién haga las pericias a los secuestros, puesto que la Policía Federal aseguró no tener los reactivos.
Estructura.- La Justicia Federal es la que debe investigar el tráfico de drogas. Tanto en Santa Fe como en Tucumán, faltan nombrar fiscales, jueces de primera instancia, de Apelaciones y de los tribunales orales federales.
Violencia.- En 2022, en Rosario se batió la peor marca al registrarse 288 homicidios. En Tucumán se contabilizaron 78, un 24% menos que en 2021, pero se triplicaron los crímenes por cuestiones de drogas: de siete pasaron a 21 y se transformó en el primer móvil de los asesinatos.
Vínculos políticos.- En la llamada “Chicago Argentina”, la Justicia comprobó que los narcos crecieron porque tenían apoyo político. En nuestra provincia, un empleado de la Legislatura fue condenado y se revelaron supuestos vínculos de empleados del Siprosa, que tenían relación con en el gremio de la sanidad, en el tráfico de sustancias.
Corrupción.- Gendarmes, policías federales y provinciales fueron detenidos por apoyar a las redes de narcomenudeo. En Tucumán, una mujer que prestaba servicio en la Digedrop fue condenada por brindar información a un clan. Un policía fue detenido por trasladar drogas y en los próximos días serán enjuiciados los efectivos que están acusados de haber intentado robar un supuesto vendedor de drogas de Famaillá. Varios de ellos fueron acusados de haber formado un grupo que se habría dedicado al secuestro extorsivo de narcos.
Procesados.- Fiscales rosarinos también fueron destituidos y procesados por sus vínculos narcos. Hace unos días, la Cámara Federal de Tucumán, ordenó que el juez de Ejecución Roberto Guyot (también debió abandonar su cargo por un juicio político) y otros 17 empleados del servicio penitenciario sean citados a declarar por una causa de venta de drogas en el penal de Villa Urquiza.
El fútbol.- En la “Chicago Argentina”, los grupos narcos no sólo manejan las barras de Rosario Central y Newell’s, sino que participan activamente en la compra y venta de jugadores. En nuestra provincia, varios miembros de La Inimitable fueron condenados por el secuestro de Margarita Toro, sospechada de dirigir una red narco en Villa 9 de Julio. En septiembre pasado, “Berenjena” fue asesinado a metros de la cancha de San Martín. Se cree que fue por una disputa por la venta de sustancias en las tribunas.