Tal vez porque no encaja en los estereotipos del héroe que es común en la pantalla, el actor Pedro Pascal se ha ganado un lugar protagónico en cuatro de las mejores series de los últimos años. Interpretó a Oberyn Martell en “Game of Thrones”, a Javi Peña en “Narcos” y Din Djarin en “The Mandalorian” y se volvió famoso, sobre todo ahora que su perfil de “héroe cansado” lidera el elenco del éxito del momento: “The Last of Us”.
La distopía apocalíptica, que se puede ver en HBO Max, es una brillante adaptación del videojuego homónimo y cautivó a la audiencia con una trama parecida a la de “The walking dead” pero más lograda. En ella, Pascal conforma una dupla por demás atractiva con la carismática Bella Ramsey, una actriz británica de 19 años que en la ficción interpreta a Ellie, una adolescente de 13.
La historia personal de Pascal también tiene momentos novelescos muy dramáticos. Su nombre completo es José Pedro Balmaceda Pascal y nació en Chile en 1975. Sus padres tuvieron que huir de su país tras el golpe de estado de Augusto Pinochet cuando él era un bebé. Su madre, Verónica Pascal Ureta tenía vínculos familiares con Salvador Allende; tanto ella como su padre José Balmaceda Riera eran firmes opositores al régimen pinochetista.
Aunque sus padres tuvieron vetado el regreso durante la dictadura, el actor sí tenía un pasaporte chileno en regla que le permitió volver por varias temporadas en su infancia y adolescencia.
Tras un breve asilo político en Dinamarca, sus padres recibieron una oferta de trabajo en Estados Unidos, donde Pedro y sus tres hermanos (dos de ellos nacieron en territorio estadounidense) se criaron, primero en San Antonio (Texas) y después en Orange County (California).
A los 11 años, Pedro competía con éxito y soñaba con una carrera de nadador profesional, pero las primeras clases de actuación torcieron el destino.
Su padre, médico dedicado a tratamientos de fertilidad, quedó envuelto en un oscuro episodio de embriones congelados sin permiso en la clínica que dirigía con otros dos profesionales, y en 1995 volvió a Chile, antes de que se concretara su proceso judicial. Cuatro años después, su esposa Verónica decidió poner fin a su vida. Fue un duro golpe para Pedro, que por entonces conseguía su primer y fugaz papel en la industria audiovisual.
El médico volvería a Estados Unidos recién en 2022, para declararse culpable de evasión fiscal en 1991 y 1992, y solo quedar libre con el pago de una fianza de 750.000 dólares. Las escasas veces que se refirió al hecho, Pedro aseguró que su padre no cometió ningún delito.
Una puerta se abre
Formado en teatro, Pascal soñaba con ingresar al mundo del cine y la TV. Desde los 20 años trajinó pasillos entregando carpetas y participando en audiciones. Al fin, en 1999 consiguió un breve papel en la exitosa “Buffy, la cazavampiros”, donde dialogaba con la protagonista Sarah Michelle Gellar, pero su personaje era rápidamente eliminado tras convertirse en vampiro. En los créditos aparecía como Pedro Balmaceda, un apellido difícil de pronunciar por los angloparlantes, así que adoptó el de su madre. Con él apareció en policiales como “Law & Order” y “NYPD Blue”, durante la era pre-streaming. Su personaje en la primera temporada del policial “Graceland” muere prematuramente, pero esa sería su última frustración antes de su rol como el agente Marcus Pike de “El mentalista”.
El gran salto vendría a mediados de 2014, cuando los realizadores de “Juego de Tronos” vieron un video de una de sus audiciones, que un amigo había filmado con su celular. Así se convirtió en Oberyn Martell, un príncipe disoluto de tierras soleadas que -en la cuarta temporada de la serie- buscaba venganza en Desembarco del Rey.
“Cuando miro atrás, mucho de mi historia personal parece haberse presentado como una oportunidad”, dijo Pascal en una entrevista de wired.com. “Cuando mis padres pudieron volver a Chile, había enormes familias de ambos lados, a las que me perdí por haber crecido en Estados Unidos. Creo que solo en la mediana edad te das cuenta de lo emocionalmente desafiante que es aceptar que no hay lugar donde plantar tu bandera como individuo. Cualquier lugar es mi hogar, y ningún lugar lo es. Pero eso también es bueno para mí. A menudo en nuestra cultura se lo señala como una desventaja, pero es una ventaja para los personajes, para la perspectiva, para el panorama.”
Pascal mantiene absoluta reserva sobre su vida privada. Sólo se sabe que no quiere traer hijos a un mundo como el actual. En eso se parece a su personaje de “The last of us”, Joel, que sufrió pérdidas muy dolorosas. “Evito todo eso no teniendo hijos, ni relaciones estables”, declaró.
En cuanto a sus relaciones familiares, apoya totalmente a su hermana Lux, nacida como Lucas Pascal y hoy actriz y activista de los derechos trans.
“Existir está conectado con el amor en una relación concreta y ¿perderlo? Algunas personas no son capaces de aplicar el pensamiento racional a ese tipo de pérdida”, afirmó.