Por Luis María Ruiz
13 Febrero 2023
Esposas y esposos. Hermanos y hermanas. Padres, madres, hijos e hijas. Los lazos familiares se imponen en la mayoría de los municipios de Tucumán a la hora de pensar en los candidatos para la sucesión, tanto en distritos del peronismo como de Juntos por el Cambio (JxC). Pero, como en toda regla, existe una excepción.
Hasta ahora, en dos de las 19 Intendencias confirmaron apellidos ajenos a su parentela para los comicios del 14 de mayo. A estos se suman otras dos localidades en las que los jefes municipales pueden aspirar a un nuevo mandato, por lo que no tuvieron la necesidad de buscar un reemplazo, puertas afuera o adentro.
Así, si se traduce este fenómeno en cifras, cerca del 80% de los intendentes de Tucumán piensa en alguien de su familia para el período 2023-2027.
La estrategia de impulsar un delfín del entorno más cercano no es exclusiva de Tucumán. Es que, a la hora de proyectar una manera de retener el poder y, a la vez, de minimizar los riesgos de traición a futuro, los lazos de confianza encuentran un reaseguro en el ADN.
Hay antecedentes históricos e icónicos, con mayor o menor éxito electoral (desde Bill y Hillary Clinton, en EEUU, hasta Néstor y Cristina Kirchner, en Argentina). De todos modos, esta práctica se ha convertido en una costumbre en los municipios de Tucumán. En especial en las últimas décadas, a partir de la vigencia del tope de dos mandatos consecutivos fijado en la Constitución de 2006.
Sin lazos de sangre
A 90 días de los comicios, sólo dos intendentes salientes ratificaron candidatos que no integran su núcleo familiar.
Se trata del peronista Marcelo Herrera, de Simoca, quien se inclinó por su jefe de Gabinete, Elvio Salazar; y del radical Mariano Campero, de Yerba Buena, quien todavía no anunció a su “favorito”, aunque quienes suenan con más chances son Manuel Courel y Pablo Macchiarola, dos funcionarios de su confianza.
Por otro lado, están los casos de dos intendentes con posibilidad de ser reelectos: Alejandro Molinuevo (UCR-JxC), de Concepción; y Francisco Caliva (PJ-FdT), de Tafí del Valle). Ambos buscarán retener la sede municipal por los próximos cuatro años.
Distrito por distrito
La intendenta de Aguilares, Elia Fernández de Mansilla, esposa del vicegobernador interino Sergio Mansilla, lanzó en un acto reciente a su hija, Gimena Mansilla, como candidata para el Departamento Ejecutivo local.
En Alberdi, la gestión de la jefa municipal saliente, la peronista Sandra Figueroa, podría tener continuidad a través de su esposo y secretario de Gobierno, Luis “Pato” Campos, quien a su vez le había precedido en el cargo.
El intendente de Alderetes, el jaldista Aldo Salomón, apuesta por hacer un “enroque” con su esposa, la legisladora Graciela Gutiérrez de Salomón.
El bandeño, Darío Monteros, referente de la lista del jaldismo en la sección electoral Este, finalmente se inclinó por postular a su hijo, el joven legislador Gonzalo Monteros, para que lo reemplace en la Municipalidad.
En Bella Vista, el radical Sebastián Salazar (UCR-JxC) propone a su esposa, la concejal Paula Quiles, quien ya había sido candidata a diputada en 2021 por la lista de Juntos por el Cambio.
En Burruyacu, el legislador y presidente del Congreso del PJ, Jorge Abraham Leal, intentará retomar las riendas del municipio en lugar de su hijo, Jorge Leal (h), quien a su vez liderará la lista oficial en la sección Este.
En Famaillá, los “Mellizos” del justicialismo tratarán de repetir su tradicional táctica de intercambiar roles electivos: el legislador Enrique Orellana, como candidato a intendente; y el intendente José Orellana, a legislador.
La intendenta de Graneros, Alejandra Cejas (PJ), confió la sucesión a su hija y secretaria de Acción Social, Raquel Graneros.
En La Cocha, el legislador Leopoldo Rodríguez (PJ) tratará de retornar al Ejecutivo local en lugar de su hijo, Leopoldo Rodríguez (h), candidato a legislador.
El jefe municipal de Las Talitas, Carlos Najar (PJ), pujará por una banca legislativa, y a su vez impulsa la postulación de su hermana, la legisladora Marta Najar.
El luleño Carlos Gallia (PJ) también tiene la mira en la Cámara, y propone a su esposa y secretaria de Cultura Martha Albarracín para asumir en la Intendencia.
El monterizo Francisco “Pancho” Serra (PJ), segundo candidato por el Oeste de la lista jaldista “Tucumán para la Victoria”, optó por su hijo y secretario de Gobierno, Francisco Serra (h).
En Tafí Viejo, el intendente saliente Javier Noguera (PJ) propone a su esposa, Alejandra Rodríguez, encargada del Punto de Contacto de Anses en esa ciudad. Noguera, a su vez, forma parte de la lista oficial por la sección Oeste.
El tranqueño Roberto “Tigre” Moreno (PJ) también tiene la meta de integrar la próxima composición legislativa; mientras, se inclinó por su hermano y asesor letrado, Antonio Moreno.
Por último, el interrogante persiste en San Miguel de Tucumán. Si bien la candidatura de la senadora nacional Beatriz Ávila de Alfaro (PJS) se mantiene como una posibilidad firme, las definiciones en la Capital están sujetas al eventual acuerdo entre los líderes locales de JxC, Germán Alfaro (PJS) y Roberto Sánchez (UCR).
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