“Soy un estúpido”, se dijo a sí mismo Iván Nemer, el rugbier argentino que recibió una fuerte sanción por racismo tras una descalificadora actitud con su compañero Cherif Traoré. Nemer le regaló una banana podrida en la Navidad pasada en el marco de un "amigo invisible" y ante la risa de todos, Traoré no se calló.
Debido a esto Nemer, quien está naturalizado italiano, fue suspendido por la Federación Italiana de Rugby hasta el 30 de junio de este año.
Asimismo, la Selección de Italia también suspendió al marplatense: el jugador estará fuera por once partidos.
Las disculpas de Nemer
Cuando le fue comunicada la sanción al pilar, el rugbier asumió la responsabilidad de los acontecimientos, pidió perdón e hizo su descargo.
“El racismo no ha tenido ni tendrá nunca ningún papel en mi vida, como no debería tenerlo en la vida de ninguno de nosotros. Lamento profundamente lo sucedido, por la estupidez de mi gesto, por el disgusto causado a un amigo, por haber causado daño a mi equipo, a mis compañeros, al país que represento y al juego que amo", comenzó diciendo.
"Vengo de un país multicultural como la Argentina, donde las culturas se mezclan desde hace más de un siglo, y siempre he compartido vestuario y cancha con compañeros y amigos de todo el mundo".
"Lo que pasó no me representa, pero al mismo tiempo debe hacerme y hacernos reflexionar sobre cuánto más queda por hacer para cambiar nuestra cultura, superar los estereotipos más descarados, acercarnos aún más de lo que ya se está. sucediendo", reflexionó.
"Acepto la descalificación y el proceso de reincorporación con serenidad pero sobre todo confío en que en los próximos meses y años podré contribuir con mi testimonio a concientizar a cada vez más jóvenes rugbiers sobre temas que deben ser abordados y entendido para mejorar no solo nuestro deporte, sino el mundo en el que vivimos”, fue el largo y contundente descargo de Nemer tras su horrible acto de discriminación", finalizó.