16 Enero 2023
IMPARABLE. Al Attiyah no tuvo rivales y defendió su título en la categoría Autos.
Es curioso que Sebastien Loeb haya sido el protagonista casi absoluto de la categoría Autos en la segunda mitad del Dakar, ganando casi todas las etapas, y que al final haya dado igual, porque el triunfo de todas formas quedó en manos de Nasser Al Attiyah por un margen que puede ser calificado de paliza sobre el resto. El qatarí, campeón de la edición 2022, se quedó también con la 2023 haciendo gala de una superioridad escandalosa: le sacó casi una hora y media de ventaja al segundo, un Loeb al que no le alcanzaron sus siete victorias de etapa ni su récord de seis consecutivas (superó las cinco en fila que había logrado Ari Vatanen en 1989) para hacerle cosquillas al de Toyota.
CÓMODO. Alexandre Giroud dominó con comodidad la categoría de los Quads.
Desde la etapa 3, cuando se puso al frente de la general, lo del “Príncipe” qatarí fue un monólogo. Uno a uno fueron cayendo los colosos como Carlos Sainz y Stéphane Peterhansel, pero él se mantuvo siempre lejos del resto. Así se quedó con su quinto “Tuareg” y quedando a tres de alcanzar las ocho de Peterhansel en Autos. Mención le cabe al brasileño Lucas Moraes, que en su primera participación se coló en el podio. Algo menos tranquila que la del qatarí, pero también muy amplia, fue la victoria de Alexandre Giroud en Quads. Durante las primeras tres etapas, el francés (campeón defensor) mantuvo un interesante duelo con el argentino Manuel Andújar (ganador de 2021), pero problemas mecánicos de este último dejaron solo a Giroud, que terminó sacándole 40 minutos de ventaja al mendocino Francisco Moreno Flores, el segundo. En Camiones, Janus Van Kasteren aprovechó el abandono voluntario del gran candidato, Ales Loprais (se bajó por un accidente que le costó la vida a un espectador) y se quedó con el título.
EQUIPO. Janus Van Kasteren, campeón en Camiones, celebra con sus asistentes.
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