Atlético Tucumán suma minutos, confianza y copas

En cada pretemporada hay amistosos que son tomados como tal y otros que no. Los partidos de Atlético ante César Vallejo y Boston River entran en el primer grupo: Lucas Pusineri usó los minutos ante los peruanos y los uruguayos como banco de pruebas. Jugaron los chicos, también los refuerzos. En definitiva, sumaron minutos casi todos.

En el cierre de los partidos amistosos de la Serie Río de La Plata apareció Estudiantes y por eso “Pusi” optó por poner, a priori, lo mejor que tiene a mano, mientras espera por la llegada de dos refuerzos. En la zaga ubicó a Bruno Bianchi y Manuel Capasso, sus centrales favoritos, o al menos los que más jugaron durante el año pasado. Agustín Lagos por una banda y Matías Orihuela por la otra. En el medio ya salen de memoria Renzo Tesuri, Guillermo Acosta y Joaquín Pereyra. A ellos se acopló Ramiro Ruiz Rodríguez, quien empezó como volante pero terminó casi siempre como un “9” bis, al lado de Marcelo Estigarribia que fue acompañado por Mateo Coronel.

En el arco, la presencia de Tomás Marchiori ya es más que un indicio. A pesar de que en el segundo tiempo el DT le dio minutos a Luis Ojeda, el mendocino será el dueño del arco en el inicio de la Liga Profesional. Y vaya si “Pusi” acertó con esa idea: ayer “Tomi” ya empezó a devolver esa confianza.

Jugó sólo 45 minutos, pero fueron suficientes para convertirse en uno de los mejores del partido con un par de intervenciones para aplaudir. Promediando el primer tiempo, Marchiori le ahogó el grito de gol primero a Mateo Pellegrino, que cabeceó dentro del área como marcan los libros, de sobrepique para que el arquero se luciera.

Minutos después fue Mauro Boselli el que exigió una respuesta brillante del “1”, quien hizo gala de sus reflejos para desactivar una media chilena que tenía destino de golazo. Bravo por él.

Atlético, por su parte, mostró su mejor versión de esta etapa veraniega. Jugó en bloque, mostró solidez, se preocupó primero por que no lo lastimaran y, cuando tuvo espacios, intentó herir con la velocidad de sus atacantes. Primero fue Coronel el que bicicleteó a la defensa “pincha” y definió buscando el ángulo superior izquierdo de Mariano Andújar que voló y se quedó con lo que hubiera sido un golazo. Luego, el propio Mateo generó una situación de peligro, buscando, con un centro tres dedos, a Estigarribia que no llegó a conectar, pero el que sí lo hizo fue Tesuri, que definió al palo y por eso las cosas terminaron 0-0 en el primer tiempo.

Coronel y Ruiz Rodríguez fueron los mejores hasta ahora en el verano y también ayer ante el “Pincha”. Entre los dos generaron el 1-0 tempranero en el complemento. Con el correr de los minutos, los siete cambios por equipo terminaron desvirtuando el partido; Atlético se conformó con la ventaja y Estudiantes lo fue a buscar, así Leonardo Godoy generó un penal, ante la marca infantil de Marcelo González, que Boselli cambió por gol. 1-1 y a los penales.

Desde los 12 pasos el mejor fue Atlético, porque Ojeda (como Marchiori hace unos días) contuvo dos penales y dejó una nueva copa amistosa servida en bandeja. Al “Decano” le quedarán dos partidos para cerrar los amistosos de pretemporada, pero ya mira con optimisto hacia el futuro. Ayer compitió bien ante Estudiantes, que se está armando con nombres importantes y amenaza con ser protagonista. No le sobró nada, pero estuvo a la altura y ganó. “Estos triunfos sirven para ir agarrando confianza”, apuntó Coronel. Y sí, Atlético vuelve con una sonrisa desde Uruguay.