23 Diciembre 2022
La casa de Gran Hermano experimentó en las últimas horas su primer regreso. Esta vez, los participantes -en vez de nominar- tuvieron que votar para que vuelva uno de los antiguamente eliminados y la mayoría terminó optando por Juliana. La decisión puso contentos a unos y muy nerviosos a otros, especialmente a Romina.
Un sector de la casa claramente quería que volviera Daniela, pero Alexis, que fue quien decidió finalmente que fuera la novia de "Maxi" quien entrara a la casa.
El que se mostró dolido y estuvo llorando un rato largo en la habitación fue Thiago que, tal vez, esperaba una devolución de gentileza por parte de su amigo el "Conejo” tras haberlo salvado a él de la placa de nominados, la última vez.
La crisis de Romina
Pero definitivamente, la que peor la pasó con el regreso de Juliana fue Romina. Ellas tuvieron un duro cruce cuando la novia de Maxi “cuestionó” la decisión de la ex diputada de haber entrado en la casa de Gran Hermano dejando a sus hijas afuera, explica el sitio Los Andes.
Esto desestabilizó a la jugadora, pero solo consiguió que la gente se ponga en contra de Juliana y, al final terminaran echándola del juego.
Ahora con su regreso, Romina quedó muy afectada y en una charla íntima con Julieta y Camila, reconoció que necesita ayuda. “Necesito un psicólogo ya, por favor” pidió Romina, mientras "Cami" (que tiene toda la data del afuera) le recomendaba que no demostraran nada delante de Coti.
Mientras Coti y Juliana se abrazaban adentro como las amigas que nunca fueron, la nueva participante del reality intentaba darles tranquilidad. “Ya va a llegar la nominación. Acuérdense que ustedes están acá por algo y la gente les grita “te amo”. Todo el juego que ustedes quieren hacer, háblenlo con la gente”.
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