Treinta y seis años después de que Argentina ganara la segunda Copa del Mundo, volvieron a emocionarse dos de los responsables de aquella consagración en México 1986: el entrenador Carlos Salvador Bilardo y su ayudante de campo, Carlos Pachamé. En las últimas horas una foto de ambos con la réplica del trofeo máximo de la FIFA conmovió a todos.
Segundo Pachamé, el hijo menor de Carlos, tiene 21 años y, como sucedió con su padre y el Doctor, es futbolista de Estudiantes de La Plata. Publicó la imagen de ambos y escribió “festejando la copa con el uno. Juntos siempre”, y el emoji del corazón. La sonrisa de Pachamé a pura felicidad con su amigo y compañero de mil batallas alegró a todos.
El domingo luego de la conquista del equipo dirigido por Lionel Scaloni se difundió la primera foto de Bilardo mirando la coronación por televisión sentado en un sofá. Lo compañaban las imágenes de dos Vírgenes. Más tarde Miguel Ángel Lemme, ayudante técnico del Doctor en su última etapa a cargo del Pincha entre 2003 y 2004, reveló que “Carlos vio el partido con su familia y me dijeron que estaba muy contento y emocionado”.
Bilardo, de 84 años, está afectado por una enfermedad neurodegenerativa diagnosticada a fines de 2018 y está bajo el cuidado de su familia y no sale de su casa. Suele recibir la visita de sus amigos como el caso de Pachamé, Lemme y sus ex dirigidos en la selección nacional como Ricardo Giusti, Sergio Batista, Jorge Burruchaga, Oscar Ruggeri, Héctor Enrique y Nery Pumpido, entre otros.
El vínculo entre Bilardo y Pachamé se remonta a aquel Estudiantes campeón intercontinental de 1968 que doblegó al Manchester United. Ese equipo ganó tres Copas Libertadores seguidas. Luego ambos volvieron a trabajar juntos en la etapa como entrenadores y el Doctor se apoyó en su ladero para la formación de equipo y armados tácticos antes de cada partido, repasó Infobae.
Quedaron marcados a fuego entre 1983 y 1990 cuando estuvieron en la selección argentina, en el proceso que alcanzó la gloria en el Mundial de México 1986 con Diego Armando Maradona en su mejor momento y luego el subcampeonato en Italia 1990.