Con la declaración de varios testigos, se reanudó hoy el juicio oral y público contra los acusados del crimen de Priscila Paz, la joven asesinada en julio de 2018.
Entre otros testimonios, se escuchó a la recepcionista del hotel donde trabajaba la víctima, quien confirmó que en la mañana del 22 de julio de 2018 vio a la joven cuando se retiró del establecimiento, secuencia que fue registrada por las cámaras de seguridad.
"Ella salió del hotel a tomar el colectivo, la vi cuando estaba en la parada. Trabajó toda la noche y no salió del hotel. Trabajamos juntas y se fue a las siete de la mañana. Ella siempre entraba y salía a horario", señaló la compañera.
Sobre la joven, afirmó: "Era buena y educada, siempre ayudaba a sus compañeras y hablaba de su hijo. A veces charlábamos y tomábamos mate esperando hasta que se desocupaba una habitación para entrar a ordenar".
En tanto, la fiscala Estela Giffoniello pidió la detención de la imputada Vanesa Argota, ante la incomparecencia de la misma y a los fines de garantizar su presencia en el juicio.
Sobre las próximas jornadas, se adelantó que se espera para mañana la declaración del profesional del Cuerpo Médico Forense (CMF) que practicó la autopsia; y de los expertos en genética (respecto a las pericias de ADN) y en informática (sobre los análisis a celulares) del Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF).
El tribunal adelantó que en caso de cumplirse con los plazos, no se descarta que entre el lunes y el martes de la próxima semana se lleven adelante los alegatos de clausura de las partes.
Llegan al debate como coautores responsables y voluntarios por el delito de privación ilegítima de la libertad en concurso real con homicidio agravado por ensañamiento: Juan José Dante Gómez, Facundo Damián Miranda, Walter Patricio Miranda, Franco Emanuel Ogas y Yanina Paola Rojas.
Por su parte, Víctor Hugo Carabajal fue acusado como partícipe necesario y voluntario de los hechos investigados. En tanto, Luciana Erika Solange Alderete y Verónica Vanesa Argota fueron imputadas como autoras de "encubrimiento".
Los hechos
Según la teoría del caso, a las 7.30 del 22 de julio de 2018, Priscila salió de su trabajo, un hotel alojamiento ubicado junto a la ruta 301. En esas circunstancias fue interceptada por Juan José Dante "El Salteño" Gómez, quien mediante engaños la llevó hasta una vivienda sin moradores en el barrio Ampliación Elena White, donde se encontraban: Héctor Jesús "Pocho" Ledesma, Walter Patricio "Borolo" Miranda, Franco Emanuel Ogas, Facundo Damián "Cancán" Miranda y Yanina Paola "Kingkona" Rojas.
En ese lugar, mantuvieron privada de la libertad y despojaron de su celular a Priscila, a quien le propinaron golpes en el rostro y en otras partes del cuerpo con un elemento contundente, agrediéndola también con golpes de puño y patadas; además, comprimieron su cuello para asfixiarla, produciendo como consecuencia una gran agonía y posterior fallecimiento. Luego, a los fines de evitar ser descubiertos, rompieron el teléfono de la víctima y lo ocultaron en el fondo de la casa de "Borolo" Miranda, en el mismo barrio.
Los captores, todos ellos adictos a las drogas, según costa en los informes y declaraciones, golpearon a Priscila: "Haciéndole padecer sufrimientos extraordinarios por la brutalidad con que la atacaron".
Con la finalidad de hacer desaparecer su cuerpo, lo cargaron en una camioneta y lo depositaron, tiempo después, en una finca de caña cerca al lugar donde residía la víctima junto a su familia. El 31 de julio, el cadáver de la joven fue hallado en un cañaveral ubicado a la vera de la ruta 301, en la localidad de San Pablo.