El clan Robles, que volvió a mencionarse por sus vínculos con el crimen del barrio Oeste II, es uno de los grupos que domina El Sifón, vecindario que históricamente fue dominado por los Acevedo, fundadores de La Inimitable, que domina las tribunas de Atlético. No se enfrentaron por el poder porque existen vínculos familiares entre ambos.
Uno de los integrantes más conocidos de este grupo es Víctor “Pipa” Robles, condenado por el secuestro de Margarita “La Jefa” Tordo, sospechada de dirigir una red de narcomenudeo en Villa 9 de Julio. El joven también fue señalado por haber cometido el mismo delito en contra de otros narcos bolivianos. También estuvo relacionado con el clan Acevedo y fue pareja de Sabrina Pasarín, condenada por un mortal accidente ocurrido en San Martín y José Colombres e hija de Mario Pasarín, que cumple condena en el penal de Villa Urquiza por tráfico de drogas.
Otro miembro reconocido es Héctor “Ponja” Robles, que fue acusado por cuatro homicidios: Matías “Geniolcito” Rodríguez, Carlos “Porteño” Guevara (le habría pedido que dejara de vender drogas en “El Sifón”), Franco Agüero (ayudaba a los jóvenes a luchar contra las adicciones) y Lucas Martín Moreno, un joven de 16 años que habría intentado asaltar a unos rondines. No existe información sobre cuál es el estado de estas causas en el regimen conclusional.