08 Noviembre 2022
EN 2020. Una ordenanza permitió que los bares no paguen tributo al poner sus mesas sobre la vereda o calle. la gaceta / foto de diego aráoz ( archivo)
En las ciudades, uno de los cambios que quedaron vigentes tras la pandemia fue la expansión de los locales gastronómicos hacia la vía pública.
Como medida provisoria ante los contagios de covid-19, cientos de cafeterías, bares y restaurantes empezaron a colocar sillas y mesas en las veredas. Ahora que avanzamos hacia una nueva etapa, la Municipalidad de San Miguel de Tucumán planea regular esta postal urbana.
“Sentarse a tomar o comer algo en una vereda, calzada o plaza se hizo ya una buena costumbre, pero no existe ninguna norma de contralor que chequee ni permita el uso de estos espacios por parte de los negocios. La idea es formalizar su uso, blanquear la situación y encuadrar la práctica dentro de una serie de normativas”, comentó ayer Claudio Viña, secretario de Ingresos Municipales, en una entrevista realizada por el noticiero “La Gaceta Central” de LG Play.
El proyecto de ordenanza será presentado este mes en el Concejo Deliberante y cuenta con la colaboración de la Dirección de Planificación Urbanística y la Subdirección de Vía Pública del municipio capitalino.
En concreto, la iniciativa exigirá que los negocios que deseen ampliar sus márgenes sobre el espacio público pidan primero autorización a la entidad de aplicación pertinente.
“En el registro habrá una serie de calles que estarán incluidas y otras que no en función de distintos criterios de seguridad. Para empezar, tenemos que cumplir a rajatabla con la Ley Nacional de Tránsito y contemplar que esas vías de circulación posean un ancho determinado; dado que el proyecto implica dejar menos carriles habilitados para el tránsito vehicular”, detalló.
También se omitirían de la lista las arterias caracterizadas por su constante movimiento de colectivos. Aunque el circuito todavía está en proceso de diagramación, dichas condiciones descartarían las calles Salta, Córdoba y Santiago del Estero.
Condiciones
Después de que el establecimiento gastronómico sea habilitado, el siguiente paso constará de crear una demarcación especial que indique los límites del área. “Hay bares que marcan con conos de plástico, cintas de obras o tachos vacíos de cerveza el cuadrante. Esto no podrá realizarse más; los propietarios deberán construir un cerramiento adecuado. Primero, por una razón estética, de planeamiento y ordenamiento de la ciudad; pero fundamentalmente por un tema de seguridad”, aclaró el funcionario.
Las estructuras tendrán que ser lo suficientemente estables para atenuar algo del impacto causado en caso de un siniestro vial. También, la municipalidad reclamará la contratación de un seguro de responsabilidad civil para que la clientela goce de cobertura ante cualquier accidente automovilístico.
Aplicación
El programa arrancaría en sus dos primeras etapas con las cafeterías. Luego, un proyecto paralelo reglamentaría la aparición de foodtrucks.
Una vez que la ordenanza se apruebe, Viña enfatizó que los comerciantes dispondrían de un largo plazo para readaptarse. El documento prevé unos 90 días como mínimo.
“Inclusive trataremos que ocurra luego del verano porque en esta época la demanda de los espacios verdes y la vía pública resulta mayor. Puede que recién a finales de marzo la situación sea óptima para activar todo el sistema”, acotó.
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