Se realiza en Tucumán una muestra que da cuenta de la genialidad de Leonardo Da Vinci. Incluye 35 máquinas que funcionan. Arte y anatomía. Taller para familias. En Sala Lola Mora, San Martín, de 16.30 a 20.30 hs. Entrada libre y gratuita.
La imaginación y los conocimientos científicos de Leonardo da Vinci, junto a su creatividad artística, le permitieron plasmar en el papel hace 500 años los bocetos de máquinas de impensable existencia en su época.
Sobre esos dibujos trabajaron el ingeniero cordobés Daniel Vázquez, con la colaboración de Juan Carlos Zampieri y su equipo, e hicieron 35 réplicas construidas artesanalmente. El público tucumano podrá verlas en funcionamiento en la exposición “Leonardo da Vinci en Tucumán: creatividad y trascendencia”, que se inaugurará hoy a las 11 en el Espacio Lola Mora (San Martín 251, planta baja). Se podrá visitar la muestra, con entrada gratuita, de martes a viernes de 9 a 12.30 y de 16 a 20, y los sábados y domingos de 16.30 a 20.30. Con sentido didáctico, el guión de la muestra se agrupa en cuatro grandes ejes.
- Aire: agrupa los distintos diseños que Leonardo realizó en pos de hacer posible el vuelo humano. Se verán reproducciones de las máquinas llamadas ornitópteros (que imitan el movimiento de las alas de las aves) y de otras que fueron un anticipo del helicóptero o del paracaídas.
- Tierra: incluyen aquellos principios y artilugios mecánicos que se utilizan para el funcionamiento de las máquinas, tales como: la biela, la manivela y los osciladores. Contiene las máquinas que permiten la producción industrial de piezas y se muestran otras pensadas para la medición de magnitudes como el tiempo o la longitud.
- Agua: agrupa todo lo relacionado con la hidráulica, con mecanismos ingeniosos para transportar o bombear líquido como el tornillo de Arquímedes, embarcaciones como los barcos a palas, distintos modelos de puentes livianos y máquinas más complejas como la sierra hidráulica.
- Fuego: abarca las piezas relacionadas con la preparación para la guerra, como carros con guadañas, torres de asalto, la catapulta y un precedente del tanque de guerra. A pesar de que Leonardo fue un hombre pacífico, sus diseños de armas de destrucción eran valorados por los poderosos, y permitieron a Da Vinci posiciones de privilegio para desarrollar ideas y conocimientos.
Una de las invenciones más asombrosas es la de la bicicleta, por su parecido con la actual. Hasta tiene cadena de transmisión. “Ya existía en esa época la cadena, solo que no se utilizaba de esa manera. Hay muchos mecanismos ya existentes que él aplica de una manera innovadora -señaló Vázquez-. La estatura inventiva de él se edifica en la aplicación práctica en mecanismos industriales o en máquinas para volar. Por ejemplo, el caso de la sierra hidráulica. Ya existía el elemento, pero no su funcionamiento automático aprovechando la fuerza de un curso de agua. Las norias también existían, pero nunca usadas de esa forma”.
Otros de los inventos que llegó hasta la actualidad es la del planeador, muy parecido al ala delta. Leonardo bocetó primero un artefacto para levantar vuelo, pero luego entendió que el cuerpo humano era muy pesado para que funcionara y propuso el planeo arrojándose de una altura. También diseñó el paracaídas, un helicóptero y otras cosas no viables, como el vaso volante y el barco volador.
Fabricar las maquetas llevó unos seis años, estimó Vázquez. Y aclaró que muestras similares están en Italia y Estados Unidos. “Ninguna tiene la cantidad de mecanismos funcionales que tiene ésta -aclaró-. Las otras son más esculturales”. Los establecimientos educativos que deseen visitar la muestra pueden solicitar turno al mail [email protected], o al teléfono 3815652197.