![Fabio Ladetto](https://img.lagaceta.com.ar/fotos/avatar_lector/27.jpg)
![REÍR PARA PENSAR. La murga Pa’ Ladrar Fino aplica con lograda precisión la estética del género uruguayo.](https://img.lagaceta.com.ar/fotos/notas/2022/10/30/970x485_967502_202210292056520000002.webp)
La Fiesta Provincial de Teatro consagró ayer a los dos elencos independientes provinciales que llevarán la bandera local en eventos nacionales. Lucía Véliz, Diego Palavecino y Andrés D’Andrea eligieron como ganadoras del certamen a la murga de estilo uruguayo “Dudas no está mal - Reflexiones caninas”, del grupo Pa’ Ladrar Fino; y a “Jardín florido”, de Modelo Rojo Teatro.
“Este jurade consideró los siguientes criterios para esta selección: construcción dramatúrgica; actuaciones, estéticas y poéticas territoriales; transversalidad con perspectivas de género; los cruces generacionales como así también la visibilización de las propuestas disidentes y de otras posibilidades de construcciones identitarias”, se señaló en el acta.
Aparte de estos principios, y en la búsqueda de encontrar un hilo conductor en la decisión de un grupo de evaluadores de un hecho artístico -tarea siempre incómoda y más cuando se da entre pares- se puede agregar la importancia de hablar de lo local como factor de peso. En las obras vencedoras, eso sirve tanto para el pasado como para el presente.
![CLIMA ASFIXIANTE. Alejandra Páez Salas y Martín Lombardelli protagonizan “Jardín florido”, de Carlos Correa.](https://img.lagaceta.com.ar/fotos/notas/2022/10/30/967502_202210292056510000001.jpg)
En el caso de “Jardín florido”, la referencia a la tucumanidad está dada desde su propio título, aunque el texto en sí no se centró en lo provincial. A partir de una poética reforzada por el espacio asfixiante de la puesta en escena (el sótano de la Sociedad Francesa), Carlos Correa logra darle a su texto el pulso y la tensión oprobiosa de los tiempos de la dictadura militar, con el uso de elementos de la época, supuestamente inocentes: un manual de jardinería, un artículo sobre prótesis ortopédicas, publicidades, letras de canciones, recetas de cocina y leyendas urbanas.
Así revisita un ayer que sigue signando al hoy desde lo más banal y cotidiano para hablar de las profundidades del mal, sostenido por las actuaciones precisas de Alejandra Páez Salas y Martin Lombardelli. Los jueces elogiaron la dramaturgia y dirección de Correa y la labor de Páez Salas.
En el caso de “Dudar no está mal...”, es lo más actual y local lo destacado. El estilo de la murga uruguaya apela al humor para develar el manejo del poder, criticar conductas sociales, mostrar lo repudiable e ironizar sobre todo, desde una mirada en torno a cosas comunes y diarias. Ese estilo se sostiene desde la estética y las canciones, con una cuerda de voces y de percusión que responde a un estilo muy definido.
Pa’ Ladrar Fino eligió retratar para su obra un día cualquiera en la capital, con los avatares más habituales, y lo hace con el brillo que el género exige. Se lo garantiza un montevideano que ofició de preparador del grupo, Jesús Fernández, de frecuente visita a la provincia (de hecho, estuvo durante la Fiesta y dictó cursos) y la tucumana Lucia Dz González, ambos también destacados por el jurado por la puesta en escena y los arreglos musicales.
Una vez más, se designaron cuatro obras como reemplazantes, que además pasan a integrar las listas para circuitos y encuentros regionales, sin orden de mérito. “Herejía. manual para una obra de (no) teatro”, del grupo Herejes, que trabaja a partir de las disidencias y los cuerpos que no entran en los cánones normativos (su directora, Tatiana Lujan Valdez, fue considerada revelación); “Golondrinas, el desarraigo de un deseo”, sobre un obrero rural itinerante que se transforma en héroe momentáneo sin poder torcer su destino (el director, Carlos Brahin Carrillo, también fue distinguido como revelación; y su protagonista, Fabio Velásquez, en actuación); “Estafadas por la historia”, del grupo Hartas, con su enfoque feminista sobre las mujeres olvidadas que fueron protagonista de la Independencia nacional; y “Hasta el fin de los días”, escrita y dirigida por Rafael Nofal, por la cual Araceli García Alzogaray fue reconocida como revelación y su padre, Jorge García, se llevó una distinción especial a la trayectoria. Los jueces destacaron además a Franco Ochi Ramacciotti como revelación actoral por “Sueños chiquitos”.