Hoy en el Tribunal Oral Federal comenzará el juicio por el crimen de Luis Armando Espinoza. En el debate serán juzgados nueve policías, un vigía comunal y un civil que habrían tenido participación en el hecho y que también deberán responder por la privación abusivamente de la libertad a Juan Antonio Espinoza.
En representación del Ministerio Público Fiscal estará el fiscal federal Pablo Camuña, quien recibió la causa luego de que el expediente fuera tratado por otras dos fiscalías. Mediante apelaciones se consideró que la muerte de Espinoza podría corresponder con una desaparición forzada. El juicio consistirá también en determinar si se aplica esa figura legal finalmente o si se lo contempla como homicidio agravado.
El tribunal será integrado por los jueces federales: Carlos Jiménez Montilla, Abelardo Jorge Basbús, Enrique Lilljedahl y Juan Carlos Reynaga.
Durante la pandemia
Luis Espinoza fue asesinado de un disparo en la espalda el viernes 15 de mayo de 2020, en medio de unos incidentes con la Policía durante una carrera cuadrera ilegal en la localidad de Melcho (Simoca).
Los sospechosos, que además retuvieron al hermano de Luis sin ninguna autorización, mantuvieron oculto el crimen e intentaron hacer creer que la víctima se había ocultado en el monte. Luego, de acuerdo con la investigación, llevaron el cuerpo de Luis Espinoza hasta la comisaría de Monteagudo y finalmente lo arrojaron por un precipicio, en Catamarca, donde días después fue hallado tras una intensa búsqueda.
El hecho implicó varias irregularidades. Ocurrió durante la etapa más restrictiva de la pandemia de Covid-19. Las cuadreras y cualquier actividad recreativa grupal estaban prohibidas, pero además para los investigadores del caso hay indicios de que el operativo policial fue totalmente irregular porque no se habría puesto en conocimiento a los superiores. Incluso, los autores del hecho cruzaron de una provincia a la otra cuando los límites provinciales permanecían cerrados para evitar la circulación de personas y el incremento de contagios.
El proceso
La primera en intervenir en la causa fue la fiscala Mónica García de Targa, del Centro Judicial de Monteros, luego la causa pasó a manos del Fiscal de Homicidios II, Carlos Sale, y finalmente el expediente fue derivado a la Justicia Federal que llevará a juicio a los acusados.
Al momento del hecho fueron detenidos e imputados: Rubén Héctor Montenegro (será defendido por Leandro Juárez) José Alberto Morales (lo asisten Ernesto Baaclini y Camilo Atim), Gerardo Esteban González Rojas (lo defenderán Julio Herrera y Sergio Rubén Faiad), Mirian Rosalba González (la defenderá Mario Mirra), Claudio Alfredo Zelaya (contrató al defensor José Luis Robles), Carlos Lisandro Romano (lo defenderán Gustavo Morales y Luis Abadie), José María Paz (lo asiste el defensor oficial Mariano Galleta), Héctor Fabio Villavicencio (lo asiste Hernán Suárez), René Eduardo Ardiles (contrató a Miguel Mercado), Victor Manuel Salinas (lo defenderá Jorge Muñoz) y Álvaro Gonzalo González (lo asiste también Herrera).
Montenegro era el subcomisario de la localidad de Monteagudo y Morales el oficial. Según la investigación, del arma de Zelaya habría salido el disparo que acabó con la vida de Espinoza.
La acusación formal es por homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas y por el uso de arma de fuego. Además, a todos menos a Villavicencio y a Álvaro González (que no son policías), se les añade el agravante de haber cometido el hecho mediante el abuso de la función o cargo por parte de miembros de una fuerza de seguridad.
La madre de Luis y de Juan Espinoza, María Soledad Ruiz, querellará en el caso junto al abogado de la Fundación María de Los Ángeles, Carlos Garmendia. A su vez, Juan Espinoza también será asistido legalmente por la abogada Stella Maris Chávez, también de esa fundación.