Por Gustavo Rodríguez
20 Octubre 2022
DESTRUIDA. Una horda ingresó a la casa de la acusada para robarle todo lo que había y luego la incendiaron.
Karen Estefanía Paz, antes de entregarse en la división Homicidios, tiró una frase que descolocó a todos. “Lo maté porque estaba cansada de que me roben”, dijo la joven acusada del homicidio de un adicto en Villa 9 de Julio.
Juan Leonel Ibáñez (18) estaba sentado en un sillón rescatado de la basura y rodeado de cuatro amigos y una chica a metros de la esquina de Benjamín Villafañe y Martín Berho, donde normalmente se juntan los adictos a consumir.
Cerca de las 20, a bordo de una motocicleta que era conducida por Martina Florencia Ledesma (23), Karen se bajó del rodado y lo atacó a puñaladas. El joven, fue llevado por su madre al Centro de Salud, donde terminó falleciendo por las heridas que había sufrido en el tórax y en el cuello.
La sospechosa decidió escaparse para no sufrir represalias. Pero no pudo evitar que una horda destruyera su casa para robarle puertas, ventanas y hasta el portón y luego le prendieron fuego. En Facebook, los familiares de la víctima publicaron una foto para mostrar cómo había quedado la vivienda.
También dejaron un polémico mensaje: “mirá asesina cómo te dejamos la casa. Ni una bombacha te dejamos. Te llevamos todo, heladera, mesa y hasta ropero”.
En Homicidios
Paz es madre de dos hijos y está embarazada de cuatro meses. Enviudó hace dos años. Su pareja fue asesinada de un disparo cuando intentó evitar que su cuñado recibiera una golpiza por parte de desconocidos.
“Karen estaba cansada de que este muchacho ingresara a su casa y le robara todo, aprovechando que ella siempre estaba sola con sus hijos. El último robo fue el domingo por la mañana”, señaló Álvaro Zelarayán que ayer presentó a las dos acusadas ante los comisarios Ramón Moreno, Miguel Carabajal y Jorge Dib.
El profesional dijo que hubo una situación que la sacó de sus cabales. “Primero ella empezó a cuestionar porque le habían robado otra vez. Ibáñez, según me contó, se burlaba de ella y la insultaba. Pero explotó cuando se dio cuenta que el chico que estaba con el fallecido tenía puesto un chaleco de su marido”, comentó el abogado. “Después se escapó por temor a sufrir represalias, lo que terminó sucediendo. Si no se ocultaba su vida corría serios peligros”, añadió en una entrevista con LA GACETA.
El profesional señaló que su defendida no tiene ninguna intención de negar la autoría del homicidio. “Pero es importante que se tenga en cuenta que actuó así porque estaba harta de la inseguridad y que las autoridades no le den ninguna respuesta”, agregó.
La auxiliar fiscal Luz Becerra será la responsable de acusar oficialmente a las dos jóvenes que quedaron detenidas y con seguridad, solicitará que se le dicte la prisión preventiva a ambas. Zelarayán adelantó que no se opondrá a ninguno de los planteos de la representante del Ministerio Público Fiscal, aunque aclaró que solicitará que cumpla la medida con arresto domiciliario, puesto que ambas están embarazadas.
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