Con su sola presencia en el cierre del 58° Coloquio IDEA, Alberto Fernández ya marcó una diferencia con la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quién cuando estuvo a cargo del Poder Ejecutivo (PE) nunca asistió a esta actividad. Pero, más allá de la distinción en el gesto, el mandatario aprovechó ese escenario, colmado de empresarios de todo el país, para mandar un mensaje contundente a la interna del Frente de Todos (FdT). Después de celebrar el nivel de debate que generaron las ponencias que tuvieron lugar en el encuentro, Fernández manifestó que “si nos animamos de una vez por todas a enfrentar el diálogo con sensatez, con sinceridad y transparencia, las posibilidades de que nos vaya bien serán más”.
Respaldado en gráficos con variables macroeconómicas para demostrar el crecimiento de la actividad, la creación de empleo industrial y la tasa de inversión, el titular del PE pidió a los empresarios “mirar el medio vaso lleno”. “Todas las curvas van para arriba, ¿por qué pensar que el vaso está medio vacío?”, interrogó. Sin negar la realidad, el dirigente del FdT reconoció que la inflación es un problema que necesita resolución y celebró su descenso paulatino. “La inflación no es un problema que se generó con nosotros, yo asumí en 2019 con 54%”, insistió. Y aclaró que solo controlando la suba de los precios se podrá garantizar una mejor distribución del ingreso. “Controlando la inflación vamos a poder garantizar que los salarios no se diluyan”, dijo.
Contexto y horizonte
“Venimos de un tiempo muy difícil, que ha sido complejo para todos los habitantes del mundo. Y entiendo que en muchos prenda la idea de la decepción, de la desesperanza, pero podemos mirar el futuro con mucho optimismo por lo que todos fuimos capaces de hacer, y además hacerlo de otro modo, de un modo que nos permita mirarnos a los ojos, discutir y llevar a la práctica el ceder para crecer”, expresó el mandatario ante la atenta mirada de los presentes. En esta línea discursiva, Fernández reflexionó e indicó que para poder generar diálogo es necesario ceder. “Ceder no es perder, es ser capaces de ponerse en el lugar del otro y ver si juntos podemos encontrar un punto de acuerdo”, consideró.
Durante su discurso, el Presidente les agradeció a los empresarios porque, “en el segundo trimestre de este año, la tasa de inversión registró un crecimiento de 22,3%, la más alta de los últimos 29 años”, y celebró que Argentina pueda culminar el 2022 registrando tres años consecutivos de crecimiento del PBI”. En relación a esto, el mandatario valoró que, “con el nivel de crecimiento de la actividad económica, nunca vimos restringida nuestra energía”. “La industria se encuentra en los mayores niveles de producción de los últimos años, con 27 meses consecutivos generando empleo registrado y superando en 92 mil los puestos de trabajo de 2019”, y anticipó que “vamos a terminar exportando este año casi 100 mil millones de dólares, récord en la historia”, precisó.
Alejado de los datos económicos, Fernández también usó la ocasión para mandar un fuerte mensaje en clave política a la oposición, pero sobre todo, al propio FdT. “Muchas veces me dicen: ‘Vos sos un débil’. Pero no quiero ni la prepotencia de los soberbios ni el coraje de los mercenarios”, sentenció. En esa línea, continuó: “Debo ser re débil, pero el que afrontó la deuda con el FMI se llama Alberto Fernández, el que afrontó la pandemia se llama Alberto Fernández y el que fue a buscar las vacunas se llama Alberto Fernández”.
En otro tramo de su discurso, también criticó al gobierno de Mauricio Macri, al tiempo que cuestionó que los empresarios no valoran la calidad institucional de su gobierno. “En este gobierno, ¿alguien les pidió un centavo para hacer obra pública?. Los desafío porque la respuesta es no”, enfatizó el mandatario.
Construir: llamado a los distintos espacios
En un fragmento de su alocución, Fernández pidió dejar de lado las discusiones estériles para que la dirigencia se dedique “a construir un país”. “No podemos perder la oportunidad que tiene Argentina de reconstruirse en un mundo que ha cambiado sustancialmente”, remarcó el mandatario, y señaló que “Argentina es una enorme productora de alimentos y tiene todas las formas energéticas que el mundo va a demandar”. “Animarnos a discutir, a debatir, a escuchar el otro y a hacer lo que a que cada uno le toque hacer, pude ser el camino que nos permita alcanzar un mejor futuro”, afirmó.