Sin un gesto de Nación, no se destrabará el conflicto del transporte

Una semana después del anuncio oficial, la Unión de Tranviarios Automotor (UTA) cristalizó el paro de colectivos que se extenderá por las próximas 48 horas en todo el país. El principal argumento de esta medida tiene origen en el reclamo salarial que hace tiempo llevan adelante los choferes de las unidades de transporte público. En un último intento por destrabar el conflicto salarial, autoridades del gremio se reunieron ayer con representantes de la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (FATAP), pero no alcanzaron ningún acuerdo. “Transportamos 9 millones de usuarios diariamente y los trabajadores del interior no podemos cobrar nuestro aumento salarial. Nos encontramos en medio de una disputa entre los Gobiernos provinciales y el Estado nacional sobre quién se hace cargo del acuerdo salarial”, había expuesto el secretario general de UTA-Argentina, Roberto Carlos Fernández en un comunicado de prensa.

“Agotamos todas las instancias de negociación previas a esta medida de fuerza, con el fin de no perjudicar a los 9 millones de usuarios diarios de nuestros servicios, pero nos niegan el acuerdo, entonces lucharemos por el aumento para los trabajadores del interior, debiendo tomar las medidas de acción gremial que las actuales circunstancias ameritan”, expresó el sindicato a través de un comunicado luego del cónclave.

El conflicto, que se inició en la madrugada de hoy, nació a partir de discrepancias entre el Gobierno nacional y las provincias respecto de qué jurisdicción debe hacerse cargo del último aumento de sueldo para los choferes. En concreto, el reclamo es por la falta del pago de 8.000 millones de pesos que afecta al último acuerdo salarial. El Ejecutivo se comprometió a transferirles a las empresas del interior, durante este año, 46.000 millones de pesos en concepto del Fondo Compensador, para que puedan hacer frente a las cargas laborales, pero hasta el momento solo se depositaron cerca de 38.000 millones de pesos. Según manifiestan en las distintas jurisdicciones, sin ese dinero las compañías no pueden hacer efectivo el aumento que estaba previsto a partir de septiembre pasado, momento para el cual un conductor debía estar ganando unos 165.000 pesos mensuales.

“De los 8.000 millones restantes no se hace cargo nadie: Nación dice que las provincias son las que tienen que pagar, las provincias dicen que no tienen la plata. Estamos jugando al gallito ciego acá, y las víctimas terminamos siendo siempre nosotros y los usuarios de los servicios, porque con las empresas no tenemos problema, ya cerramos, pero no nos pueden pagar porque no les llega la plata”, explicó el titular de UTA a nivel nacional.

Diálogo cerrado

El vicepresidente de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor (Aetat), Jorge Berretta, manifestó a LA GACETA que de momento las negociaciones están cerradas y en caso de que Nación “no reaccione y compense a las provincias del interior” la medida de fuerza no se interrumpirá y dejará a 600.000 tucumanos sin servicio hasta el viernes. El dirigente del organismo remarcó que el paro “es producto de no poder afrontar un aumento salarial pedido por los empleados del sector”. “En estas condiciones económicas y discriminados constantemente por el poder central que centraliza los recursos en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) no podemos asumir un compromiso que nos resulta incumplible en este momento”, sostuvo. Berretta también lamentó que el gobierno de Alberto Fernández siga aplicando “políticas macristas” al transporte en cuanto a la distribución de compensaciones tarifarias. Y enfatizó que la primera salida coyuntural es que se le otorgue fuerza de ley a un proyecto que amplía la partida presupuestaria para 2022 de 46.000 millones de pesos a $59.500 millones para distribuir esta diferencia en lo que queda hasta fin de año. “Ese total de $13.500 millones representa un 40% de lo que recibe el AMBA en un mes”, dijo.

Postura gubernamental

Consultado sobre el tema, el gobernador Osvaldo Jaldo hizo mención a las asimetrías que se observan en relación al AMBA en esta materia y de manera contundente declaró que la Provincia “viene haciendo un aporte en compensaciones para que los colectivos funcionen, no para que estén parados y este es el planteo que les hice a los empresarios: se tienen que esforzar”.