08 Octubre 2022
Desde su estreno hace menos de un mes, “Dahmer Monstruo: La historia de Jeffrey Dahmer”, se convirtió en la serie estrella del momento a nivel mundial en la plataforma de streaming, Netflix. La atrapante trama narra la crudeza de los asesinatos cometidos por Jeff, y devela las identidades y el detrás de escena de los macabros crímenes que cometió el “caníbal de Milwaukee”. Este fuerte impacto, además, se vio reflejado en las redes sociales, donde su nombre fue tendencia en múltiples plataformas.
Pero como suele suceder con la interpretación de estos personajes basados en personas reales, los actores llevan meses e incluso años preparándose para el papel. En este caso, Evan Peters explicó la dificultad que le implicó ponerle el cuerpo a uno de los asesinos más conocidos de la historia: “Ver los crímenes que había cometido me produjo mucho miedo. Interpretarlo y narrar la historia de la manera más realista posible fue una de las cosas más difíciles que he hecho”, reveló.
El asesino de Milwaukee mató a un total de 17 hombres drogándolos y desmembrándolos para más tarde comerse partes de sus cuerpos. En la serie, se denuncia también cómo el racismo y la homofobia fueron factores determinantes para el suceso de asesinatos ya que la sociedad no juzgaba como debía sus crímenes.
En este sentido, Peters afirmó en una entrevista que, para interpretar el papel de Dahmer, recordó la importancia de no ponerse en el lugar del asesino, ni intentar ver las cosas desde su punto de vista para entenderlo mejor. El objetivo de la serie no es simpatizar con él sino recalcar todo lo que hizo y homenajear a las víctimas: mostrar que la historia del asesino es mucho más que solo él.
Este actor también formó parte del elenco de “American Horror Story” y admitió que, tras interpretar papeles tan intensos y malvados, necesitó dos años de terapia para recomponerse mentalmente. “Tomó mucho de mí. Perdí contacto con muchos amigos y familia. Fue de verdad muy duro”.
Otros actores que se vieron afectados por sus personajes
Uno de los casos más representativos fue el del actor Heath Leger. A pesar de ser aclamado por la crítica tras su interpretación como El Joker en "The Dark Knight" (2008), Leger afirmó que al principio no supo si aceptar el papel, puesto que no quería ofender en ningún momento la interpretación del mismo papel por Jack Nicholson en ‘Batman’ (1989). Para prepararse su papel, el actor estuvo recluido seis semanas en un motel. Allí se propuso adoptar la peculiaridad de su voz y su sádica risa.
La sumersión fue tal que para algunas escenas con violencia, el actor pidió que se le pegara de verdad y así el resultado fuese más realista. Este compromiso con el papel llevó al actor a límites inimaginables: tiempo después confesó que experimentó muchos problemas de insomnio, se alejó de su familia y amigos por un periodo muy prolongado y finalmente, requirió ayuda psicológica. Heath Ledger falleció al cabo de unos años producto de una sobredosis.
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