Desde 2019 que el cumpleaños de San Miguel de Tucumán no se festejaba a todo trapo. La música, la comida, la reunión... todo eso quedó atrás por las razones que ya sabemos, pero finalmente las cosas volvieron a ser como antes: anoche se celebró, a lo grande, el 337 aniversario de la fundación de San Miguel de Tucumán.
Miles de personas se congregaron ayer en la explanada del Monumento al Bicentenario para disfrutar de un espectáculo musical. El evento, organizado por la Municipalidad de San Miguel de Tucumán contó con varios números, de todos los géneros y para todos los gustos.
Cuando empezaron las actividades -cerca de las 20.45- todavía había algunos deportistas corriendo por la plaza y pasaban niños con uniforme, pero ese ambiente típico de festival ya se sentía. Es que para esa hora, cientos de personas ya se habían congregado en avenida Mate de Luna y en el parque Avellaneda. Algunas familias ya estaban desde temprano; habían aprovechado para recorrer la tradicional feria Gourmet y de Artesanías que ya estaba allí dispuesta.
Con el pasar de las horas y con el inicio de los grupos musicales, las sillas puestas frente al escenario comenzaron a ocuparse. Finalmente empezó la fiesta: primero fue el turno del grupo Tawa, que presentó composiciones propias; más tarde llegó con su canto Leandro Robin, que hizo emocionar a los presentes con canciones como “Razón de vivir”, “Sube” e “Y dale alegría a mi corazón”.
Luego, ya con un predio bastante más lleno, le tocó el turno al grupo Milonguera. Con bandoneon y con violín, interpretaron “Nada”, “Algo contigo” y “Bésame, entre otras canciones. Y allí se armó el baile: fueron varias las parejas que se animaron a bailar un tango. A continuación llegó el turno de “Yesterday”, con varios covers.
El acto central
Para las 22.30 ya no cabía ni un alfiler cerca del escenario y la multitud rebasaba, al menos, una cuadra. Ya faltaba poco para él. Familias enteras, grupos de jóvenes y de adultos mayores estaban esperando la llegada de Palito Ortega. Y, al parecer, había mucha expectativa por su show.
Cuando “El Rey” salió a escena, el público enloqueció. “Siempre es una emoción muy grande volver a los orígenes, al punto de partida. De aquí me fui por el mundo con todos mis sueños”, dijo el cantante, que al hilo y sin parar interpretó muchos de sus éxitos como “Un muchacho como yo”, “Bienvenido amor”, “Viva la vida” y “Despeinada”. Y eso fue lo que todos estaban esperando: los presentes bailaron y cantaron con su coprovinciano de principio a fin. Así, festejaron, entre tucumanos, un nuevo cumpleaños de la capital.
Un sueño cumplido: una vecina de 86 años conoció a su ídolo
Ayer temprano se dispusieron, frente al escenario, sillas para que los presentes pudieran sentarse a disfrutar de los espectáculos. María, de 86 años, fue una de las primeras en llegar y llamó desde el principio la atención de Sebastián Finkelstein y de Silvina Saleme Posleman, conductores y animadores del evento. Es que cada vez que ellos nombraban a Palito Ortega, la vecina enloquecía. Más tarde contó que jamás había podido ver al cantante en vivo, y Finkelstein le prometió que esa noche ella iba a poder conocer a su ídolo. Y así fue: minutos antes del concierto del cantante, el intendente Germán Alfaro y su esposa Beatriz Ávila la escoltaron hasta el camarín del artista para que María pudiese conocer a Ortega.