Patricia Bullrich estuvo invitada anoche al programa conducido por Mirtha Legrand y debió responder sobre el intento de magnicidio sobre Cristina Fernández de Kirchner sobre el cual había guardado cierto silencio hasta aquí.
“No todos repudiaron el hecho”, comentó la conductora del programa mirando a Bullrich, quien rápidamente se dio por aludida. “A mi lo que no me gusta es que me quieran obligar como si fuera una policía de la palabra a decir una determinada palabra”, criticó. No obstante, reconoció que frente a un “hecho de terrible gravedad siempre estoy en contra de la violencia y por el imperio de la ley”.
Aún así, sostuvo: “no me gusta que venga una policía de la palabra y que si no dijiste esta palabra no repudiaste”, expresó la presidenta del PRO. En ese sentido, explicó que al escuchar la cadena nacional del presidente Alberto Fernández anunciando un feriado “en un país que necesita trabajar, una plaza de ellos, y dijo que los responsables de este atentado son la prensa, la oposición y la justicia. Frente a eso me pareció una enorme bajeza”, se lamentó.
Y recordó el día en que Alfonsín convocó a una concentración por el riesgo de la democracia. “Yo era una joven militante que estaba abajo. Y estaban todos los dirigentes arriba, no era una plaza sectaria”, planteó en referencia al acto partidario que se hizo un día después del atentado a Cristina Kirchner en la Plaza de Mayo.
El operativo de seguridad sobre Cristina Kirchner
“Nosotros (el PRO) dejamos a la Presidencia de la Nación la mejor custodia del mundo porque había venido el G20. Compramos lo mejor, hay unas mantas anti balísticas y 6 camionetas blindadas”, destacó Bullrich cuando opinó sobre el flojo operativo de seguridad que resguardó a la vicepresidenta.
“A las mantas anti balísticas te las tiran encima y son como un chaleco, te envuelven y te sacan. Hay una parte de la custodia que te saca, otra que rodea a la persona y la policía de la calle es la que se tiene que ocupar porque puede haber uno o tres agresores”, remarcó.
Al analizar la situación, consideró que desde el gobierno nacional “confiaron mucho en la idea de que su militancia los cuidaban, se dejaban rodear por la militancia y desprecian lo profesional. Pero es poco profesional, en la militancia se te cuela cualquiera más si no tenés una valla o distancia”.