"Lo amo, pero no lo deseo". ¿Te ha pasado sentirte atraído o atraída por una persona y cuándo fueron a la cama no ha funcionado? ¿Acaso entre ambos las relaciones sexuales suenan a trámite? ¿Falta plenitud, quizás? Si ese es tu caso, la comunicación será imprescindible para entender lo que está ocurriendo y para tomar una decisión. Al menos así lo entiende la psicóloga y sexóloga Mariana Luna, especialista en terapia de parejas.
"Continuar o no con una relación porque el sexo es un problema debe ser una decisión analizada y consensuada, incluso. Para algunos, el mal desempeño puede ser fruto de un malestar intenso", añade. Falta de tiempo; cansancio; hijos; experiencias anteriores, vergüenza o alguna dificultad sexual podrían ser algunos de los problemas, detalla.
- Usted destaca la importancia de charlar de manera clara. ¿Por qué?
- Hablar de sexo en las parejas continúa siendo un tema tabú. Más allá de la edad y del género, todavía las personas no saben tramitar su propio deseo. Desconocen lo que les da placer, lo que les gusta y lo que les disgusta. De hecho, no existe una educación sobre el placer. Estos factores, asociados a los tabués y creencias, limitan enormemente el disfrute.
- En concreto, ¿cuál sería el tabú?
- Son muchos los tabués y es mucha la desinformación. Aprendimos el placer desde lo porno y sin embargo no existe nada más alejado de la realidad. Es decir, nuestras fantasías no tienen nada que ver con la cotidianeidad de cada pareja. Por desconocimiento y por vergüenza se busca el placer afuera, en vez de explorar nuestro propio disfrute.
- ¿Qué pasa con la sexualidad después de la llegada de un hijo?
- La llegada de un hijo plantea una de las crisis más vitales, debido a cambios físicos, vinculares, emocionales, etcétera. En una pareja heterosexual, por ejemplo, las exigencias hacia la mujer, que debe 'volver al ruedo', implican mucho sufrimiento. Esto impacta directamente en la pareja, puesto que el deseo, los tiempos y las exigencias se modifican. Son momentos de crisis. Entender esto no resulta nada fácil, pero es necesario. Sugiero diálogo y acompañamiento.
En otras palabras, el ciclo vital que se está atravesando tiene mucha incidencia en la pareja. En una familia con niños chicos, el estrés, el cansancio y la falta de sueño juegan un rol considerable, apunta Luna. Otro aspecto que observa la experta es que no estamos educados emocionalmente para compartir tiempo con el otro: "por lo general, los cónyuges se ven a la noche, con todo el cansancio del día; especialmente en la madre, que todavía tiene a su cargo las tareas de cuidado, en mayor porcentaje que el hombre".
- Se oye como un conflicto vinculado a la mujer.
- Por un lado, aparece la realización personal. Por el otro, la pareja. Y por otra parte, los hijos. Cuesta integrar estos aspectos. Hay que aceptar que los niños, en sus primeros años, requieren tiempo. A veces, algunos adultos no están preparados para responder. Cuando se enfrentan a la realidad, colapsan. Quizás a la mujer le cueste integrar esos tres aspectos y al hombre le cueste asumir esa demanda.
- ¿Cómo se potencia el deseo sexual?
- No existe una clave para potenciar el sexo. Se trata de un complemento que incluye alimentación, actividad física y erotismo. Tenemos que animarnos a darnos tiempo para jugar y explorar nuestro eros.
- ¿Qué se debe saber sobre el orgasmo?
- El orgasmo es una respuesta fisiológica. Por ello, en vez de correr detrás de esto como si fuera una meta, convendría prestarle atención a lo previo. Ahí radica el placer.
En definitiva -cierra Luna- si queremos que nuestra convivencia en pareja sea positiva y plena sexualmente, tenemos que empezar por darle tiempo a cada instante.