03 Septiembre 2022
Bersa es la única fábrica de armas que existe en Argentina y produce alrededor de 100.000 unidades por año en su planta ubicada en Ramos Mejía. La compañía fue fundada hace más de sesenta años, específicamente en 1958, por tres inmigrantes italianos.
El primer modelo que fabricaron fue una pistola Modelo 60 que tardaba cerca de seis horas entre que entraba a la línea de producción y salía ya terminada. Actualmente, su fábrica tiene capacidad para elaborar 288 armas por día y el proceso se acortó a 28 minutos por unidad.
Desde su fundación produjo más de 2 millones de armas y lanzó más de 50 modelos. A partir de 1973 empezaron a exportar, lo cual representa alrededor de un 70% de su producción. Su principal cliente es Estados Unidos, que se lleva 9 de cada 10 pistolas que envían al exterior. A su vez, también exportan a otros destinos, como Polonia, Perú, Filipinas, Sudáfrica, Rusia y Uruguay.
En el mercado interno su principal cliente es el Estado Nacional, las provincias y municipios que adquieren cerca del 20% de su producción para las fuerzas de seguridad. "De las 120.000 armas que tiene la provincia de Buenos Aires, 85.000 son Bersa", ejemplificaron desde la compañía durante su 60° aniversario, fecha para la cual, por primera vez, abrieron las puertas de su fábrica.
En 2018 la firma proyectaba facturar $ 345 millones y entre 2016 y 2017 invirtió más de $ 18 millones. Según detallan en su sitio web, manejan un 70% del mercado civil.
Los inicios de Bersa
Ercole Montini, quien trabajó en su Italia natal como operador metalúrgico en la marca Beretta, llegó al país en 1948 con 30 años y de inmediato consiguió un puesto en la compañía de máquinas de escribir Olivetti. Al mismo tiempo había armado un pequeño taller en un galpón alquilado donde elaboraba resortes, tornillos y todo tipo de piezas que le encargaban los talleres de barrio.
Al tiempo, su jefe Savino Caselli, le propuso acompañarlo en su emprendimiento porque su sueño era ser inventor. Luego se sumó un joven llamado Benso Bonadimani, de 19 años, que había pisado suelo argentino en 1955. Tres años más tarde fundaron Tecnofres que seguía funcionando como taller hasta que un cliente llegó con un pedido muy específico. "A uno de mis socios le encargaron la fabricación de un repuesto para la Ballester Molina (desarrollada por la compañía Hispano-Argentina Fábrica de Automotores SA)", contó Bonadimani, en diálogo con el medio El Cronista en 2018.
Tiempo después, recordó, viajaron a Italia y de ahí trajeron una pistola la cual copiaron para empezar a fabricar en serie. En 1962 rebautizaron al emprendimiento como Bersa, una unión de los nombres del trío fundador.
Lo más popular
