En defensa de la democracia, el PJ se concentró en Plaza de Mayo

Bajo el lema “Con la bandera a defender la democracia”, el Frente de Todos convocó ayer a congregarse en el centro porteño, para luego marchar hacia la Plaza de Mayo. La respuesta fue contundente. Miles de persona pertenecientes a organizaciones sociales, partidarias y sindicales de distintas localidades se congregaron a lo largo de la mañana en Plaza de Mayo y en las inmediaciones de la Avenida 9 de Julio, entre el Obelisco y la Avenida Independencia, en “defensa de la democracia” y en repudio al atentado a Cristina Fernández de Kirchner.

Los manifestantes llegaron con bombos, pancartas y trompetas. Claramente se identificaron las organizaciones sindicales nucleadas en la CGT y la CTA, así como los movimientos sociales pertenecientes a la CCC, el Movimiento Barrios de Pie, Somos Patria, Peronismo Militante y Jubilados Unidos y Organizados, entre otros. Ellos se concentraron sobre la Avenida 9 de Julio y su intersección con Independencia y con la Avenida Belgrano.

No guardar silencio

El jueves a la medianoche, cuando el presidente, Alberto Fernández, dispuso que ayer sea feriado nacional, organizaciones sociales y políticas convocaron a movilizarse en distintos puntos del país. Desde el Partido Justicialista (PJ) llamaron a marchar a Plaza de Mayo y a las plazas de todo el país “en solidaridad con Cristina y en defensa de la vida y de la democracia”.

Antes del acto de cierre de ayer, el Presidente se reunió con el Gabinete nacional de ministros para repudiar el intento de magnicidio, y por la tarde, en Casa de Gobierno, recibió a representantes de los sectores sindicales, sociales, empresariales, de derechos humanos y diferentes credos “para construir un amplio consenso contra los discursos del odio y la violencia”.

Luego, el masivo encuentro se cerró con la lectura de un documento a cargo de la actriz y dirigente Alejandra Darín, acompañada en el escenario con todos los funcionarios del Gabinete, gobernadores, legisladores y dirigentes sociales y sindicales que se habían reunido con Alberto. “El pueblo argentino está conmovido, impactado por lo ocurrido, incluyendo a millones que no simpatizan con Cristina ni con el peronismo. En honor a todos nuestros compatriotas es que hacemos este llamamiento a la unidad nacional pero no a cualquier precio: el odio afuera”, fue la última frase del comunicado.

La mayor ovación surgió cuando dijo: “nadie que defienda la República puede permanecer en silencio o anteponer sus diferencias ideológicas al repudio unánime que esta acción depara”.

“El límite del que hemos oído hablar en las últimas horas no se cruzó ayer. Si no queremos que la intolerancia y la violencia política arrasen con el consenso democrático que hemos construido todos desde 1983 hasta la fecha, debemos contextualizar lo ocurrido anoche (el jueves) contra la vicepresidenta”, marcó Darín.

El texto vinculó el atentado con el accionar de “un sector minúsculo de la dirigencia política y de sus medios partidarios que viene repitiendo un discurso de odio y de criminalización de cualquier dirigente popular o afín al peronismo”. Asimismo, aludió a la presencia de bolsas mortuorias, ataúdes o guillotinas en movilizaciones opositoras como formas legitimadoras de discursos de odio.

“No es inocente ni gratuita la legitimación de discursos extremos, de llamados a la agresión, de planteos que niegan legitimidad democrática del adversario político. Nadie es individualmente responsable por las acciones de otros, pero quienes cedieron minutos de aire a los discursos de odio deberán reflexionar sobre cómo han colaborado para que lleguemos hasta esta situación”, resaltaron.

Cristina dejó su domicilio: no fue a la marcha y la visitó el Presidente

Ayer, a las 16.22, Cristina Fernández de Kirchner salió de su domicilio en Recoleta. La vicepresidenta se retiró de su vivienda ubicada en Juncal y Uruguay, luego de haber sido víctima de un intento de asesinato por parte de un joven de 35 años el jueves por la noche. En esta ocasión, la ex presidenta amagó subir al auto (diferente del que habitualmente utiliza) y volvió hacia sus seguidores apostado detrás del vallado para saludarlos. Fue un momento de nerviosismo por parte de la numerosa custodia de civil y uniformada, hasta que la vicepresidenta regresó al vehículo y partió sin que se supiera cuál fue su destino y no participó de la movilización partidaria. Antes, la había visitado el presidente, Alberto Fernández,  quien llegó minutos antes de las 14 a la casa de Juncal y Uruguay, en el barrio porteño de Recoleta. El jefe de Estado arribó en un vehículo oficial y subió rápidamente al quinto piso del edificio, donde reside la ex mandataria, y se retiró 50 minutos después. Fuentes oficiales consultadas indicaron que estuvieron “a solas y sólo ellos conocen el contenido de la charla”.

La CGT no hará un paro: Daer confirmó que se declaran en alerta

Luego del intento de asesinato a Cristina Fernández frente a su casa en Recoleta y luego de una extensa reunión en conjunto con la CTA, la CGT descartó un paro total para el próximo lunes y se declaró en “alerta permanente” durante las próximas horas. Así lo confirmó el co-titular de la central obrera Héctor Daer en una conferencia de prensa, donde también remarcó que iban a participar en la masiva movilización que se realizó ayer en Plaza de Mayo para apoyar a la vicepresidenta.

“El Consejo Directivo se declaró en estado de alerta permanente, en sesión permanente y en principio convocándose para el lunes a las 16 para volver a analizar la situación y cómo se desenvuelven estas horas”, señaló el dirigente luego del encuentro realizado en la sede de la central obrera ubicada en el barrio de Monserrat. Según trascendió, la idea de realizar el paro a principios de la próxima semana en reclamo por el intento de asesinato en la noche del jueves, había sido propuesta por la CTA -que encabeza Hugo Yasky-, que convocó a un “paro nacional activo con movilización”.