Los representantes de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) decidieron no adherir al documento mediante el cual se repudió el intento de magnicidio del que fue víctima la vicepresidenta, Cristina Fernández, que había surgido durante un mitin en la Casa Rosada, citado por el presidente, Alberto Fernández.
Los directivos de la entidad de la comunidad judía habían sido invitados al encuentro de esta tarde, pero rechazaron la adhesión al texto debido a que lo consideraron un alegato político de un partido.
"Se deben eliminar los discursos y las acciones violentas desde todos los sectores de nuestra sociedad para garantizar el bienestar de la república y la democracia”, señalaron, mediante un comunicado posterior, las autoridades de la DAIA.
La reunión se llevó a cabo en el primer piso de la Casa Rosada, antes del acto en la plaza de Mayo, en el que fue leído el documento en cuestión.
Encabezado por el Presidente, del mitin participaron referentes de otros credos, sindicalistas, empresarios y representates de agrupaciones de derechos humanos. No estuvo ningún representante de alguna fuerza de la oposición, ni miembros del sector industrial.
Entre los asistentes estuvieron los gobernadores de Buenos Aires, Axel Kicillof; de Formosa Gildo Insfrán, y de La Rioja, Ricardo Quintela; el presidente de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), Amos Linetzky, y otros referentes religiosos. Concurrieron también, de acuerdo a La Nación, la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, y Tati Almeida, por Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora.
Por la DAIA participó su presidente, Jorge Knoblovits; por la AMIA, Linetzky; por la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas, Christian Hooft y Jorge Gómez; el presidente del Centro Islámico, Aníbal Bakir; por la Federación Argentina de Iglesias Evangélicas, Marcelo Castro y Claudio Bravo; por la Asociación Árabe Argentina Islámica, Hamid Bid, y por la Conferencia Episcopal Argentina, el obispo Oscar Ojea y el sacerdote Máximo Jurcinovic.