02 Septiembre 2022
NÚMERO DE SERIE LIMADO PARCIALMENTE. Para ejecutar a Cristina Kirchner, el atacante habría utilizado el arma de un amigo.
Con el objetivo de ejecutar a la vicepresidenta, Cristina Fernández, el atacante, Fernando Sabag Montiel, le habría robado el arma a un amigo.
El tirador -que por estos minutos está siendo indagado por la jueza María Eugenia Capuchetti por homicidio agravado en grado de tentativa- se mezcló ayer a la noche entre militantes cristinokirchneristas, logró acercarse hasta la ex mandataria, a unos pocos centímetros de ella le apuntó y gatilló contra su cabeza, aunque la bala no salió, debido a que el proyectil no habría estado en la recámara de la pistola calibre 32 que utilizó.
De acuerdo a una nota publicada en La Nación, Sabag Montiel no figura como legítimo usuario de armas de fuego en los registros de la Agencia Nacional de Materiales Controlados (Anmac, ex Registro Nacional de Armas -Renar-).
De acuerdo a fuentes de la investigación, Sabag Montiel le habría robado la pistola Bersa calibre 32 a un amigo. El arma tenía el número de serie parcialmente limado, por lo cual los investigadores suponen que había pasado por varias manos antes de llegar al atacante de la vicepresidenta.
“En su base, la pistola tiene numeración parcial 250″, dijo un investigador, citado por La Nación. A partir de ese número, los investigadores intentarán determinar quién fue el propietario original. En ese sentido, la pistola sería sometida a químicos, para que se pueda apreciar el número de serie completo. Con ese número los investigadores policiales y judiciales podrían hacer la trazabilidad del arma.
En cuanto al estado del arma, el peritaje realizado por la División Balística de la Policía Federal determinó que era apta para el disparo, pero que no tenía bala en la recámara. La calificación de “apta para el disparo” es importante, porque si se determina que el arma no estaba en condiciones los abogados defensores utilizan ello como argumentación para atenuar la calificación del hecho. No sería este el caso. Sin embargo, que la pistola haya estado “apta para disparo” no implica que haya estado lista para disparar; por ejemplo, en este caso no tenía bala en la récamara, por lo cual no habría podido ser disparada.
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