30 Agosto 2022
ÚLTIMO MINUTO. El cohete no pudo ser lanzado en el día programado. reuters
CABO CAÑAVERAL, Estados Unidos.- La agencia espacial estadounidense (NASA) aplazó por al menos cuatro días el lanzamiento de su colosal cohete de nueva generación, en su esperado primer vuelo de prueba. El viaje no tripulado de seis semanas significa el regreso a la Luna, 50 años después de la última misión del proyecto Apolo.
El reloj de la cuenta atrás se detuvo unos 40 minutos antes de la hora prevista para el lanzamiento, las 08.33 hora local, mientras el cohete del Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS), de 32 pisos de altura y dos etapas, y su cápsula para la tripulación Orión esperaban el despegue desde el Centro Espacial Kennedy en Cabo Cañaveral, Florida.
La agencia espacial estadounidense dijo que detectó un problema en uno de los motores principales, después de que los equipos de lanzamiento hubieran comenzado a llenar los tanques de combustible del núcleo del cohete con propulsores de oxígeno e hidrógeno líquidos superenfriados.
La NASA no dio una nueva fecha de lanzamiento, pero dijo que su primera oportunidad de lanzamiento de reserva disponible estaba fijada para el viernes 2 de septiembre. Habrá otra ventana el lunes 5 de septiembre.
Artemis I, el megacohete que pretende ir más allá de la Luna y regresar a la Tierra, será el primer despegue del programa Artemis de la NASA, que busca llevar a los humanos de regreso a la Luna. Esta vez, además, está en los planes la posibilidad de establecer un asentamiento en el satélite, y quizás sentar las bases para un viaje a Marte. Pero todo eso será después de 2025, para cuando está previsto el primer viaje tripulado desde 1972.
Los problemas que influyeron en la decisión de la NASA de aplazar el despegue fueron varios. Según explicó el gerente de la misión Artemis, Mike Sarafin, hubo un problema con la purga del motor número 3. El hidrógeno líquido superfrío se hace circular a través del motor para prepararlo para el lanzamiento. Los otros tres motores funcionaron como se esperaba, de acuerdo con el reporte que hizo la cadena estadounidense CNN.
Además, hubo un problema con la válvula de ventilación en el tanque interior, agregó Sarafin.
Por otro lado, las condiciones meteorológicas tampoco fueron favorables durante la ventana de lanzamiento: hubo precipitaciones a primera hora de la mañana y relámpagos más tarde.
Ahora, el equipo de lanzamiento se volverá a reunir, hoy, para discutir las opciones.
La NASA ya había determinado más de una fecha de despegue para la misión Artemis I antes de la suspensión de ayer.
Sin embargo, los ingenieros todavía deben solucionar el problema para determinar si se puede usar esa ventana de lanzamiento, que empieza el viernes, a las 12.48 (hora de Miami, una menos que en Argentina), y dura 120 minutos.
El programa Artemis lleva el nombre de la diosa griega Artemisa, hermana gemela del dios Apolo, con el que se denominó al programa espacial que llevó a astronautas estadounidenses a la Luna entre 1969 y 1972.
El cohete del Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS), de 32 pisos de altura y dos etapas, y su cápsula para la tripulación Orión debían despegar desde el Centro Espacial Kennedy en Cabo Cañaveral, durante una ventana de lanzamiento de dos horas a partir de las 8.33 hora local.
El viaje inaugural del SLS-Orión, una misión bautizada como Artemis I, tiene por objeto poner a prueba el vehículo de más de 2,5 toneladas y poner al límite el diseño antes de que la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio lo considere fiable para transportar astronautas.
El programa Artemis tiene como objetivo devolver a los astronautas a la Luna a partir de 2025. También pretende establecer una colonia lunar a largo plazo como trampolín para futuros viajes, aún más ambiciosos que envíen humanos a Marte.
Con más de una década de desarrollo, con años de retrasos y miles de millones de dólares en sobrecostos presupuestarios, la nave SLS-Orión ha costado hasta ahora a la NASA al menos 37.000 millones de dólares, incluyendo el diseño, la construcción, las pruebas y las instalaciones en tierra. (Reuters-Especial)
Superpotente
El sistema de lanzamiento más complejo
Considerado como el cohete más potente y complejo del mundo, el SLS representa el mayor sistema de lanzamiento vertical que la agencia espacial estadounidense ha construido desde el Saturno V, usado en el programa lunar Apolo. Antes del amanecer de ayer, los equipos de la histórica plataforma de lanzamiento 39B comenzaron a llenar los tanques de combustible del cohete con varios cientos de miles de kilos de propulsor de oxígeno líquido e hidrógeno líquido superenfriado. Un problema que se anticipaba como obstáculo para el lanzamiento era cualquier señal durante el llenado de que un accesorio de la línea de hidrógeno recién reparado hubiera fallado.
Tripulación simulada
Tres maniquíes soportarán radiación y calor
Cuando finalmente pueda partir, la cápsula Orión llevará una tripulación simulada de tres personas -un maniquí masculino y dos femeninos- con sensores para medir niveles de radiación y otras tensiones que experimentarían los astronautas. Un objetivo es probar la durabilidad del escudo térmico de Orión durante la reentrada, ya que golpea la atmósfera terrestre a 39.429 km/h (32 veces la velocidad del sonido), mucho más rápido que las reentradas de las cápsulas que vuelven de una órbita terrestre baja. El escudo térmico está diseñado para soportar la fricción de la reentrada, que se espera que eleve la temperatura fuera de la cápsula a casi 2.760 grados Celsius.
Rayos y tormentas
Vuelo suspendido por mal tiempo
Las condiciones meteorológicas pesaron en la decisión que tomó la NASA de aplazar el lanzamiento de Artemis I, explicó Mike Sarafin, gerente de la misión. “El tiempo nos habría impedido el despegue al comienzo del período establecido debido a la precipitación. Más adelante, los rayos dentro el área de la plataforma no nos habrían permitido hacerlo”, explicó. Las condiciones del tiempo se mantuvieron un 80% favorables al comienzo de la ventana de lanzamiento, pero las tormentas en alta mar con posibilidad de rayos retrasaron cerca de una hora el proceso de abastecimiento de combustible, que debía empezar a la medianoche.
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