Una defensa terminante, un pateador que no perdonó nunca y la determinación para aprovechar cada una de las oportunidades. El partido de Los Pumas fue casi perfecto. Y con ese casi, increíblemente, le alcanzó para lograr una nueva hazaña. En tierras maoríes vencieron por segunda vez en su historia a los All Blacks y, como frutilla del postre, quedaron punteros del Rugby Championship.
Fue un partido tremendo de los argentinos, con dos tucumanos en cancha, Thomas Gallo y Matías Orlando, que combatieron como los espartanos. El resultado, 25 a 19, refleja lo que fue un partido parejo, pero que al final se inclinó hacia los argentinos.
Luego de haber hecho un partidazo en Argentina contra Australia, llegaban a Christchurch para validar ese triunfo. Y aunque los de negro no estaban pasando su mejor momento, con muchas críticas hacia el staff técnico, nunca se puede considerar a los All Blacks como un rival mas. Pero Argentina expuso sus mejores armas, y logró no solo doblegar a los dueños de casa, sino que además dieron una muestra de carácter para lo que resta del torneo.
Increíblemente Los Pumas lograron la victoria siendo arrasados en las formaciones móviles. Los neozelandeses se apropiaron del scrum, de los lines y sobre todo del maul, en el que fueron muy superiores. Pero la defensa argentina no permitió que esa supremacía se viera reflejada en el marcador. Con un Tomás Lavanini supremo y una tercera línea conformada por Juan Martín González, Marcos Kremer y Pablo Matera que contuvo todo el tiempo los ataques negros, Los Pumas lograron aprovechar sus chances. Santiago Carreras jugó tal vez su mejor partido como apertura y los centros, Matías Orlando y Matías Moroni le pusieron un candado a la mitad de la cancha. Pero además contaron con un Emiliano Bofelli impacable a los palos, autor de 20 de los 25 puntos argentinos. Michael Cheika logró en poco tiempo revertir la mala imagen que arrastraban los argentinos tras la salida de Mario Ledesma.
Los Pumas escribieron otra página gloriosa para el rugby argentino. Pero ahora viene lo mejor. Hay que defender la punta. Falta otro partido contra los All Blacks, y cierran con dos test contra Sudáfrica. Lo que viene es durísimo, pero hoy demostraron que se puede soñar.