La producción lechera en vilo por los costos

La actualidad de la producción láctea no es alentadora en nuestro país. Los incrementos en los costos de producción, la devaluación de la moneda nacional y la falta de estabilidad económica no hacen más que tener en vilo a los tamberos argentinos. Una imagen que refleja el momento del sector es que después de 100 años, en la Exposición Rural de Palermo no hubo exponentes de vacas Holando-Argentino, la raza insignia de la producción lechera.

Ante este escenario, Sebastián Murga, presidente de la Sociedad Rural de Tucumán (SRT) reconoció que la actividad viene golpeada en todo el país, pero sobre todo en las provincias como Tucumán, hace años e incluso hoy se encuentra por debajo de los costos de producción. “Todo esto demuestra lo distorsionado que está todo y que el campo no forma los precios”, remarcó el titular de la entidad rural local.

Panorama regional

En relación a los incrementos sobre los costos de producción, el ingeniero y asesor Martín Gana puntualizó que “las vacas comen en dólares y producen en pesos”. “El 70% u 80% de los insumos, como el maíz o la soja, están en dólares y también hay que tener en cuenta las maquinarias y otros aparatos que utilizan en la producción y también están dolarizados”, agregó.

El profesional también indicó que los productores del noroeste argentino, que representan en cuanto a volumen de vacas y producción cerca del 1% de la producción nacional, no están bien por la incertidumbre reinante en el contexto económico. Pero, además tienen que afrontar la competencia que representan los grandes productores de las cuencas centrales del país. “Nuestras cuencas, como las de Salta, Tucumán y Jujuy, que todavía es incipiente, son más que nada de consumo interno y siempre es cascoteada por leche que ingresa de los grandes centros porque tienen mejores precios al reducir sus costos por la producción en grandes cantidades”, enfatizó.

Consultado sobre la cadena productiva y la formación de precios, Gana negó que el productor forme el precio de los productos que después se comercializan en los supermercados. “El productor es el eslabón más chico de la cadena y hoy está cobrando entre $45 y $48, dependiendo la calidad de su producto, por litro de leche”, puntualizó.

Aunque reconoció que el valor de la materia prima fue acompañando lentamente al proceso inflacionario de la economía nacional, el ingeniero señaló que el productor lechero es optimista a pesar del escenario actual. “El productor es optimista porque a la leche la tenés que vender todos los días y está acostumbrado a perder plata en más de una oportunidad”, remarcó.

La vocación como clave

El presidente de la Mesa de Lechería de Tucumán, Patricio Altamirano, coincidió con la mirada de los otros consultados sobre la realidad compleja que atraviesa el sector y por eso manifestó que la única motivación que tienen los 52 productores que trabajan en esta provincia es la vocación. “El tambero que no tiene vocación no persiste en la actividad porque tenemos que sortear distintas complicaciones a lo largo del tiempo y encima esta actividad te demanda trabajar todos los días del año”.

Ante los desafíos que afrontan los protagonistas de la actividad, el referente dijo que en el sector deberían acomodarse varias cosas para que la actividad pueda transitar con mayor previsibilidad. “En la medida que el contexto general sea impredecible también impacta en lo que hacemos. De hecho, en algún momento hubo acompañamiento estatal, sobre todo con los productores más chicos. Pero, personalmente creo que la leche, como alimento básico con gran impacto en la alimentación, debería estar un poco más acompañada y protegida para que los productores tengan otro ánimo y generen más”, enfatizó Altamirano. Y sentenció: “La producción de leche es una economía regional castigada porque aquí todo nos cuesta más”.

Corre por detrás

Los balances son negativos

El último Informe Lácteo de la Asociación Argentina de Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (CREA), cerrado al principio de junio de 2022, informó sobre la relación costos-ingresos que hay un mejor balance que hace un mes pero todavía dicha relación está muy por debajo de la necesidad del sector y pone a la actividad lechera en una zona donde aún falta espacio para recuperar. Según los informes difundidos por CREA, en abril de 2022 se podía comprar 1,5 kilos de maíz con un litro de leche: respecto a marzo anterior, esta relación se mantuvo estable (con un resultado positivo de 0,2 puntos porcentuales). Sin embargo, dicha relación se encuentra un 25,6% por debajo del promedio de los últimos cinco años (cuando se podía adquirir 1,9 kilos de maíz con el precio de un litro de leche). Por último, el informe privado se refirió la situación que reportó el fuerte aumento (con un alza del 20,3% interanual) en los costos de producción en marzo de 2022. También se indicó que “los últimos aumentos en el precio de la leche (a valores constantes) no alcanzan a compensar el incremento de los costos de producción, siendo los rubros de sanidad y recría los de mayor aumento.