25 Julio 2022
INTERCAMBIO. Francisco recibió la bienvenida de varios líderes de pueblos originarios del territorio que hoy es Canadá, antes de iniciar su visita.
EDMONTON, Canadá.- El hallazgo de cientos de tumbas anónimas en terrenos que pertenecieron a internados católicos, sacudió a Canadá y desnudó los horrores a los que eran sometidos los niños indígenas en nombre de la educación y la “civilización”, separados de sus familias y llevados a escuelas donde se los despojaba de sus costumbres ancestrales, de su lengua y de sus valores comunitarios, obligándolos a prepararse para una vida de servidumbre.
El Papa Francisco, jefe de la Iglesia católica, ejecutora en Canadá de estos programas aprobados por el gobierno, viajó hasta Edmontón, en la provincia occidental de Alberta, para pedir disculpas a las comunidades indígenas por estos abusos.
“Este es un viaje de penitencia. Digamos que ese es su espíritu”, dijo el pontífice a periodistas después de que su vuelo despegó de Roma.
Como parte del peregrinaje, el Papa tiene prevista la visita a un antiguo internado y la reunión con los pueblos indígenas. También visitará la ciudad de Quebec e Iqaluit, la capital del territorio de Nunavut.
Las atrocidades por las que la Iglesia es acusada como perpetradora -o al menos cómplice- ocurrieron entre 1881 y 1996.
Durante ese tiempo, se calcula que unos 150.000 niños indígenas fueron separados de sus familias y llevados a internados, donde muchos pasaron hambre, recibieron palizas y sufrieron abusos sexuales, en un sistema que los defensores de derechos humanos califican como “genocidio cultural”.
Según la Comisión de la Verdad y la Reconciliación de Canadá, más de 4.000 niños indígenas murieron por negligencia o abuso en estas escuelas residenciales, muchas de las cuales estaban a cargo de la Iglesia Católica.
El avión papal rodó con las banderas de Canadá y del Vaticano ondeando fuera de las ventanas de la cabina. Tras desembarcar en un ascensor, Francisco subió a un auto blanco, que lo dejó en el hangar. Desde allí, se desplazó en silla de ruedas.
OFICIAL. El primer ministro y la gobernadora recibieron al Papa en Alberta. fotos reuters
La gobernadora general Mary Simon, que representa a la jefa de Estado de Canadá, la reina Isabel II, fue la primera en saludar al Papa. Le siguió el Primer Ministro canadiense, Justin Trudeau.
Entre los dos altos funcionarios, el Papa escuchó la actuación de tamborileros y cantos nativos. Luego, varios líderes indígenas, muchos de ellos con elaborados tocados, se acercaron a saludar e intercambiaron regalos.
“Le pedí al Papa que camine con nosotros”, dijo el Gran Jefe George Arcand, de la Confederación de las Primeras Naciones del Tratado Seis, en una entrevista con Canadian Broadcasting Corp.
No todos estuvieron de acuerdo con la forma en la que se organizó la visita. RoseAnne Archibald, jefa nacional de la Asamblea de las Primeras Naciones, quien también saludó al pontífice, criticó la organización “unilateral” del viaje y la naturaleza “arcaica” de la Iglesia, que no tiene mujeres en puestos de liderazgo.
“No sentimos que se haya tratado de los supervivientes”, dijo en el aeropuerto. “Ha sido más sobre la iglesia promoviendo la idea de la iglesia, la recaudación de fondos para la iglesia”.
Aunque los dirigentes canadienses conocen desde hace largo tiempo el elevado número de niños que murieron en los internados desde 1907, la cuestión saltó a la luz pública con el descubrimiento, el año pasado de las tumbas sin nombre en los antiguos internados o cerca de ellos.
El primero de esos cementerios, ubicado en los terrenos de una antigua escuela de Columbia Británica, fue descubierto en mayo de 2021, y es considerado un testimonio de la segregación histórica sufrida por los niños indígenas y del abuso flagrante de niños a manos de programas aprobados por el gobierno y ejecutados por la Iglesia. Desde entonces, se descubrieron más de 1.300 tumbas, lo que ha provocado que se tomen medidas a nivel nacional en favor de la reconciliación y la reparación para los pueblos indígenas.
El hallazgo más grande, en Saskatchewan, reveló 715 tumbas sin identificar, lo que evidencia tanto la magnitud de esta práctica como la probabilidad de que se produzcan nuevos y considerables descubrimientos
En respuesta a las presiones derivadas de esos descubrimientos, el Vaticano se disculpó, a principios de este año, por el papel de la Iglesia católica en los internados, durante una visita de delegados indígenas a la sede pontificia.
Pero los supervivientes y los líderes indígenas creen que no es suficiente y consideran que corresponde una compensación económica, la devolución de los objetos indígenas, la publicación de los registros escolares, el apoyo a la extradición de los acusados de abusos y la anulación de una doctrina del siglo XV que justifica el despojo colonial de los pueblos indígenas en forma de bula o edicto papal. (Reuters)
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