Por Mariana Apud y Carlos Leonardo Oardi 25 Julio 2022
PODIO GENERAL. Chávez, en el medio, sonríe a pleno durante la premiación.
El sol pegó fuerte, el mercurio de los termómetros subió hasta los casi 30 grados que se pronosticaron y la edición 17 de la Maratón Independencia -con unos 5.000 participantes entre las tres distancias- no se escapó al rango de siempre: sumamente dura. El circuito es único en el país, con muchas subidas y bajadas, una propuesta por demás interesante para los maratonistas acostumbrados a trazados llanos. La vuelta para unir San Miguel de Tucumán, desde el Monumento al Bicentenario, con Yerba Buena creció en exigencia por las condiciones climáticas.
“La gente se portó muy bien. En el Camino del Perú, unos chicos salieron con la manguera, bidones y caramañolas”, contaron “Maxi” D’Andrea y Martín Mora. Para ellos, esas personas fueron como unos ángeles que también soportaron el calor en alguna medida.
Hasta el ganador de la general sufrió bastante. “Entre el kilómetro 39 y 40 caminé un poco”, comentó Edgar Felipe Neri Chávez. El santiagueño, especialista en distancias de mediofondo, fue sincero con respecto a su victoria en -apenas- su segunda maratón. “No la preparé. Mi objetivo es el Nacional de media maratón en agosto. Que me vaya bien en la Independencia era algo circunstancial. Si salía, salía, y sino me tiraba a un costado y se terminaba”, comentó.
“Su historia es de superación”, comentó Armando Chávez, hermano del campeón, minutos antes de la llegada. Felipe es el quinto de siete hermanos que se criaron en Suncho Corral, a 100 kilómetros de la capital santiagueña. “Me inspiró para empezar a correr y bajar varios kilos”, explicó el profesor de historia, que también hizo varios trabajos de cuidado de campo y de animales en la zona rural de La Magdalena, donde toda la familia trabajó.
LARGARON. A las 11, los atletas de los 42K emprendieron la carrera. El microcentro, el parque 9 de Julio, la Casa Histórica y Yerba Buena fueron recorridos.
Al ganador lo escoltaron en la clasificación general de la Maratón Independencia, Gerardo Atia y Tomás Gómez Zarco, ambos de Santiago del Estero. “Estoy muy feliz por el podio porque son mis compañeros de entrenamiento”, comentó con orgullo Chávez.
En la general de damas también hubo tonada santiagueña, aunque Franca Romana puso más precisión. “Soy de Las Termas”, remarcó la atleta de 40 años. Como su comprovinciano, se llevó el cheque de $50.000. A diferencia de Chávez que lo destinará al deporte, Romana invertirá de otro modo. “Quiero hacerle la pieza a mi hijo. Esto sirve para comprar algo de los materiales”, afirmó la mamá de cuatro hijos. Neimé, de ocho años, será el afortunado que logrará la independencia dentro de la casa del barrio termense Cementerio. Agustina Abalsa y Nazira Hazzan completaron el podio femenino.