Debido a la difícil situación económica que atraviesa el país y al aumento de los precios de los alimentos, en algunos comedores rosarinos comenzaron a hacer chorizos con una mezcla de polenta y carne: los llaman "chorilentas".
La iniciativa se lleva adelante en el comedor "Madres Unidas", del barrio Parque Casas, y en el espacio social "Un Sol" del barrio Nuestra Señora de la Paz, en Granadero Baigorria.
"Lo hacemos en repudio a lo que está pasando. Este Gobierno nos ilusionó con salir adelante y con llenar las heladeras, pero hoy están vacías y no se puede comer porque no se puede comprar", afirmó Walter Vallejos, referente de la organización Luchadores Independientes Organizados (LIO), en diálogo con Telefe Noticias (Santa Fe).
Y agregó: "No queremos salir a la calle y marchar como lo hacíamos antes porque hay una interna política a la que no queremos sumarnos".
El referente social indicó que desde Nación hace "seis meses" que no les mandan los insumos necesarios para poder cocinar. "Los gobernantes están en otra sintonía", indicó.