16 Julio 2022
Raúl Albarracín y Enrique Romero
El legislador Raúl Albarracín y el subsecretario de Tránsito y Transporte de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán, Enrique Romero, criticaron al radicalismo provincial, tras el encuentro de los principales dirigentes de la UCR con el gobernador interino, Osvaldo Jaldo, en la Casa de Gobierno.
Según Albarracín se trató de una “exposición más que oposición”. El legislador dijo que “el diálogo entre la oposición y el oficialismo es fundamental para establecer políticas de estado que redunden en beneficio de la gente y es el camino adecuado. Lo cual no ocurrió en la reunión en cuestión”.
Además consideró que “cuando no se acuerdan proyectos que resuelvan los problemas de la gente, o un partido que es oposición se pone a disposición lisa y llanamente, más que tener un rol de opositor se busca solo un rol de exposición”.
En un mensaje para el diputado Roberto Sánchez, el legislador alfarista dijo: “El presidente de la UCR debiera haber planteado al gobernador la postura de defender la vigencia de la constitución ante los pretendidos avances en adelantar las elecciones, manifestándose en contra de dicha pretensión oficialista y actuar en defensa de la constitución presentándose en el juicio que promueve el partido justicialista en la cámara contencioso administrativo”.
Y agregó: “resulta ser que la oposición que dicen representar termina siendo servil a la exposición de las decisiones políticas que este gobierno provincial toma en desmedro de la gente y las banderas de la UCR”.
También Romero salió a disparar a los radicales y a defender la postura del intendente Germán Alfaro, quien –según manifestó el funcionario- “no confunde disposición con oposición”.
“La disposición es para con el pueblo y la oposición es al desgobierno”, aclaró subsecretario de Tránsito de la municipalidad.
“El actual eje fáctico de Tucumán: Manzur-Jaldo-Jaldo-Manzur, asegura la inercia de una provincia que necesita cambiar de dirección para detener su caída”, dijo. Luego aseguró que ambos “saben que dependen el uno del otro; saben que su único enemigo es Alfaro al que necesitan decapitar porque amenaza el intento de perpetuarse en el poder”.
Y continuó: “Jaldo debería saber que la inflación del 70% aniquila las necesidades calóricas de los Tucumanos; que es corresponsable y responsable del 47 % de pobreza; de los 150.000 desocupados; del narcotráfico y narcomenudeo; del tsunami de inseguridad; del 50% de la población que carece de agua potable y/o cloacas; del asistencialismo clientelar que solo sirve para ganar elecciones; del uso y desprestigio de la Justicia en beneficio de unos pocos; de las centenas de pymes y comercios que se fundieron por la cuarentena y del pésimo nivel educativo de nuestros chicos, entre otras cosas”.
Según Romero, la política tucumana de las últimas dos décadas “es un vaivén patético entre estos taitas de la política que, cada vez que gobiernan, consiguen rehabilitar al otro”.
“Hace 8 meses Manzur y Jaldo se lanzaban todo tipo de epítetos, acusándose de Traidores y de ser responsables de la crisis socioeconómica, corrupción, desgobierno e inseguridad, que agobia a los tucumanos”, recordó el funcionario, para quien el gran desafío de Alfaro “es que la gestión de gobierno para que tenga sentido progresista, incluyente y realizable, acabe con la corrupción, la politiquería, el clientelismo y la mediocridad. Redefinir el marco institucional y jurídico, para instituir sanciones disuasivas a los delincuentes de cuello blanco”.
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