Frente a la protesta y cese de comercialización de granos y hacienda convocada para este miércoles por la Mesa de Enlace, el ex titular de la Federación Agraria Argentina (FAA), Eduardo Buzzi, manifestó su rechazo: "Lamento que la Federación Agraria Argentina se sume al paro porque no se entiende qué carajo están reclamando".
"No está claro qué piden. Es una protesta que tiene más que ver con la oposición política que con reclamos que el campo le pide al Gobierno para mejorar sus condiciones", dijo Buzzi en FM La Patriada y cuestionó que, antes del anuncio del paro, los dirigentes rurales no se hayan reunido con los funcionarios del Gobierno.
Para el ex dirigente, no se trata de una casualidad que la Sociedad Rural (SRA) "haga la protesta esta semana y la semana que viene abra la exposición en Palermo", ya que le permitirá llegar a esta última "con una posición de fortaleza".
Del mismo modo, marcó sus diferencias con la actual conducción de la FAA y dijo que "le molesta mucho" que la entidad "sea el furgón de cola de esta expresión", al hacerle "seguidismo a las demás entidades".
En ese sentido, recordó que en 2011 la entidad "declaró autonomía de la Mesa de Enlace, de los partidos políticos y de los grupos económicos".
"No les gusta esta experiencia política que está gobernando y quieren una experiencia como la de Cambiemos. Contribuyen desde ese lugar al intento de retorno de una expresión de derecha", agregó Buzzi.
Por otro lado, el e presidente de la FAA sugirió que en el caso de una eventual modificación en los niveles de gravámenes a las exportaciones, estas "deben contemplar una segmentación" a los pequeños y medianos productores.
"No es lo mismo un chacarero de 50 hectáreas que uno de 20.000, 30.000, que los hay y cada vez más", afirmó.
No obstante, Buzzi dijo que "no hace falta aumentar las retenciones" sino que, antes de ello, "hace falta controlar lo que las multinacionales y operadores de exportación de granos hacen en los puertos".
"Hay muchos centenares de millones de dólares que se escapan de recaudar en los puertos por el desmontaje de controles que aplicó el macrismo, y que recién ahora se refuerza con el Senasa y la AFIP controlando qué cosa suben en los barcos", explicó.