La ministra de Desarrollo Social de la Provincia, Lorena Málaga, comunicó la decisión de la Unidad Fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual N° 3, a cargo del fiscal subrogante Daniel Marranzino, de archivar por falta de pruebas la denuncia por presunto abuso sexual en contra de dos celadores del Dispositivo de Cuidado Institucional Santa María Goretti, planteada por el abuelo de una interna.
“Esto demuestra que las adolescentes están bien cuidadas y que tienen una gran accesibilidad a todos los recursos que le plantea la Justicia e ingresos al Sistema de Salud en forma mensual”, ponderó la funcionaria, según dio a conocer la cartera a través de un comunicado.
En el Ministerio de Desarrollo Social destacaron que, según la resolución judicial emitida por el Ministerio Público Fiscal (MPF), de las investigaciones “no surgió ningún elemento que acredite los hechos denunciados por el abuelo de una de las internas”. Además, indicaron que prestaron declaración en Cámara Gessel cuatro adolescentes que están alojadas en la institución, y "negaron los hechos denunciados" manifestados por la familia de la menor.
Málaga confirmó que “la causa fue archivada porque ninguna de ellas ha manifestado haber sufrido algún abuso en la institución”.
Además, consideró que, por esta situación, "se dañó la dignidad de las adolescentes y la de los trabajadores del Dispositivo". "Eso es difícil de reparar, porque esos daños producen malestares a veces irreversibles”, aseveró.
A fines de marzo pasado, un hombre acudió a tribunales porque un estudio médico habría revelado que su nieta había sufrido abusos sexuales. Esa denuncia ingresó a la Fiscalía subrogada por Marranzino.
Según el informe del Ministerio de Desarrollo Social -bajo cuya esfera se encuentra el Goretti-, en el expediente se demostró que "uno de los denunciados no estaba de servicio el día en que habría ocurrido el hecho; y el otro ni siquiera había ingresado a trabajar en el instituto para esa fecha”.
En ese marco, Málaga explicó que la decisión de la Justicia se tomó “luego de una exhaustiva investigación, en donde las niñas y adolescentes alojadas ahí declararon en Cámara Gesell y tuvieron la atención desde los juzgados de familia, del Ministerio Público Fiscal (MPF), de la Defensa y los Abogados del Niño”.
“Esto debe ser motivo de reflexión para toda la sociedad: es que son niños y niñas que ya vienen con una vulneración importante, y volver a exponerlas y a revictimizarlas en sus situaciones personales y en sus identidades constituye una violencia”, remarcó la funcionaria.
Por ello, pidió "prudencia" cuando se produzca una denuncia, en especial, de estas características. “Hay que tener cuidado y dejar que la Justicia investigue, porque podemos obstruir la investigación, impedir que se conozca la verdad y por sobre todas las cosas, a veces, nos podemos constituir en cómplices o encubridores”, alertó.
La directora de Niñez, Adolescencia y Familia, Myriam Martini, también se refirió a la decisión de la Justicia en este caso. “Se han llevado a cabo todas las medidas investigativas. De toda la prueba producida, que es prueba testimonial, Cámara Gesell de las adolescentes, prueba documental y sobre todo la tarea de investigación que ha realizado el MPF, la investigación es clara y contundente en cuanto a resultado porque no ha habido ningún elemento que haga presumir que la denuncia es cierta y, por el contrario, cada prueba que se produjo confirmó que no solo no hubo elementos que aseveren la veracidad de la denuncia, sino, por el contrario, los elementos encontrados confirmaron que la denuncia era falsa", señaló.