El cuerpo del represor Miguel Osvaldo Etchecolatz, quien falleció el sábado pasado a los 93 años, fue sometido a una autopsia a pedido de la defensa que lo representaba en los juicios de lesa humanidad que se tramitaban en su contra. Según indicaron las fuentes judiciales, todavía no se conocen los resultados de la autopsia.
“El cuerpo de quien en vida fuera Miguel Osvaldo Etchecolatz será sometido a una autopsia, a pedido de la defensa”, informó Ricardo Basilico, presidente del TOF 1 La Plata, durante el comienzo de la audiencia del juicio unificado por los crímenes cometidos en los ex centros de clandestinos de detención Pozo de Banfield, Pozo de Quilmes y el Infierno, en Lanús, en el que el represor se encontraba detenido.
La muerte de Miguel Etchecolatz
Etchecolatz falleció el 2 de julio a las 5.30 en la Clínica Sarmiento de la localidad bonaerense de San Miguel, donde estaba internado con custodia policial. El ex subjefe de la Policía Bonaerense durante la última dictadura estuvo bajo la tutela del Servicio Penitenciario Federal y el pedido de autopsia lo realizó su defensa.
El represor Etchecolatz tuvo a su cargo 21 campos clandestinos de detención que funcionaron en la provincia de Buenos Aires. Allí llevo a cabo la tortura y muerte de hombres y mujeres, por lo que recibió nueve condenas por genocidio. Esto derivó en que cumpla su detención en la unidad penitenciaria de Campo de Mayo.
Fue responsable de la desaparición de los estudiantes secundarios de La Plata, episodio conocido como “La Noche de los Lápices” y estuvo acusado por la desaparición del testigo Jorge Julio López.