El Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas NOA-Sur (Conicet) pondrá en marcha el jueves, en nuestra provincia, la iniciativa “Breathe2Change: Conectando Ciencia y Sociedad por un Aire más Puro” que tiene como finalidad monitorear la calidad del aire, que está seriamente afectada por las actividades industriales y por la quema a cielo abierto de biomasa y de combustibles fósiles..
El acto de presentación se llevará a cabo el jueves en el Aula Magna de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales (25 de Mayo 474) a las 9.30.
De la implementación del proyecto, premiado a nivel mundial por la fundación Alexander von Humboldt, Alemania, formarán parte personal científico y técnico de Conicet NOA Sur: se montará un laboratorio de estudios atmosféricos en el Inquinoa (Conicet-UNT) y otro en la Dirección de Monitoreo y Laboratorio Ambiental, de la Secretaría de Estado de Medio Ambiente de Tucumán.
Los resultados de la aplicación de la iniciativa luego serán escalados para crear una red de monitoreo de calidad de aire a nivel nacional e internacional, gracias al apoyo que ya cuenta por parte de sus socios en Argentina y otros países como Alemania, Francia e Italia.
El modelo basa sus acciones fundamentalmente en tres fases progresivas y continuas, tendientes a revertir la contaminación del aire.
1. Monitoreo: implementación de una red de sensores que captan y trasmiten datos sobre la calidad del aire a una plataforma en la nube.
2. Análisis: un equipo de científicos especializados analiza todos los datos recabados.
3. Toma de acción: mediante un programa de asistencia y colaboración científica, el proyecto busca impulsar e implementar políticas públicas e iniciativas privadas de cambio en los territorios en los que opera.
Sólo en Argentina se quemaron más de un millón de hectáreas en 2020, y el 95% de los incendios fueron provocados por el ser humano. La contaminación del aire que esas quemas generan produce 7 millones de muertes al año y es la causa de enfermedades respiratorias, cardiovasculares, y la mayor fuente de riesgo a la salud pública.
En Tucumán, estos episodios se ven reforzados por las condiciones climáticas típicas de la región, cada vez con más largos períodos sin lluvia, altas temperaturas y fuertes vientos. A diferencia de los daños que los incendios causan a la fauna y flora, que se pueden observar fácilmente, la contaminación atmosférica producida por los incendios no se puede evaluar sin recurrir a sistemas de vigilancia o monitoreos terrestres.
Los países de ingreso alto y posición privilegiada han establecido en los últimos 40 a 50 años sistemas robustos y costosos para vigilar la calidad del aire. Esta tecnología no se ha difundido amplia y equitativamente, y muchos países en desarrollo carecen de ellos. Para llenar ese vacío, Breathe2Change estará a cargo de la creación de la primera red de monitoreo de calidad de aire en Tucumán, en un trabajo colaborativo de instituciones académicas, gubernamentales y no-gubernamentales, y ciudadanos.