La separación de Shakira y Gerard Piqué se convirtió en una de las noticias más comentadas dentro de la prensa nacional e internacional. La colombiana sigue muy enojada con el futbolista y se lo hizo notar cuando fue por la mañana a buscar a sus dos hijos Milan y Sasha para llevarlos al colegio.
Luego de separarse tras 12 años de relación, al parecer por varias infidelidades del jugador del Barcelona, Piqué se fue de la casa familiar a un departamento. Sin embargo, pese a que entre la pareja las cosas no están bien, él quiere mantenerse cerca de sus hijos.
El jugador los fue a buscar para llevar al colegio, en la puerta de la casa estaban los paparazzi, y Piqué vivió un papelón: Shakira no dejó que estacione en auto en la cochera, incluso amagó a no darle los chicos.
Minutos más tarde, y par de mensajes después, Shakira finalmente cedió y dejó que los niños se subieran al auto del padre para ir al colegio.
El ciclo El gordo y la flaca (Univisión), muestra cómo efectivamente el español llegó y se detuvo en la puerta de la vivienda. Además, mostraron los trabajos de limpieza en la calle frente a la propiedad, ya que un fanático de la cantante le escribió una declaración de amor en el asfalto.
En medio de las decenas de rumores que han sobresalido de la situación, llamó la atención un comentario hecho, recientemente, acerca de la mala situación emocional que estaría pasando el deportista tras la ruptura. Fue Joan Laporta, presidente del Barcelona, quien habló del tema en medios de comunicación.
“Piqué está sufriendo mucho por Shakira. Tanto como imaginamos, tenemos en nuestra imaginación jugadores con fama, dinero y todo lo que nos gusta, pero ellos son personas y Piqué es un gran ser humano. Es uno de los capitanes, tiene mucha suerte y nos ha dado mucho como equipo”, comentó para las revistas ‘¡Hola!’ y ‘Caras’.