En el día a día se muestra como un hombre sereno. Habla lo justo y necesario, no levanta demasiado su tono de voz, sonríe y se muestra respetuoso y amigable con todos mientras camina el complejo “Natalio Mirkin”. Sin embargo, dentro del campo aparece su otro yo; siempre con cara de enojado y a viva voz intenta copar la parada. Además, “raspa que te raspa” y le hace sentir el rigor al delantero de turno.
“Es un personaje que he creado”, ríe con ganas Hernán Lopes en diálogo con LG Deportiva, antes de aclarar los tantos. “No, no pasa nada. Ese es mi estilo de juego, mi forma de desempeñarme y de manejarme dentro de la cancha. Siempre fui así, no quiero perder a nada”, agrega el central, uno de los buenos valores del equipo en esta temporada.
Si bien llegó a principios de 2021, se fue asentando con el correr de los meses en San Martín. Con capacidad de mando, pierna fuerte, entrega y muchas ganas de superarse, se fue transformando en una pieza clave del equipo. Claro, él entiende y conoce sólo una manera de hacerse valer en la última línea. “Mi función es recuperar pelotas y trato de cumplirla como sea. Hago todo para defender y que al equipo no lo lastimen”, dice antes de volver a bromear respecto de los cruces con delanteros rivales y jueces que se incrementaron durante las últimas fechas. “Últimamente me están buscando bastante; tal vez por eso se nota un poco más, jaja”.
“Igualmente no es que lo hago para la tribuna o para demostrarle a alguien; es mi manera de jugar. Yo soy así e intento ganar como sea”, agrega.
Pese a que se muestra “rústico”, Lopes es uno de los primeros que practica el juego asociado y la pelota al pie en el “Santo”. Casi siempre sale desde del fondo con cabeza levantada buscando al compañero mejor ubicado en el campo para entregarle la pelota. “Nosotros intentamos salir siempre de manera clara desde el fondo; esa es nuestra idea y lo que pide Pablo (De Muner). De esa manera, generamos superioridad numérica y, a partir de ahí, intentamos tener situaciones de gol”, explica, intentando minimizar esos errores que aparecieron en los últimos partidos pero que afortunadamente no implicaron goles en contra. “Son los riesgos que se corren por este tipo de juego. Pero está bueno hacerlo. Hay más beneficios que contras”.
Lopes, además de rendir en buen nivel, es polifuncional. Desde que llegó a Bolívar y Pellegrini ya jugó como lateral por derecha, como primer y como segundo central. Sólo le faltó desempeñarse como lateral por la izquierda. “De más grande entendí que es importante eso. Antes no me gustaba jugar como lateral. Pero bueno, luego comprendí que la idea y el objetivo es aportarle cosas positivas al equipo y adecuarse a las necesidades de mis compañeros y a lo que pide el entrenador”, remata.
El juego contra Guillermo Brown aparece como una nueva final, otro obstáculo que San Martín necesita superar en la carrera por alcanzar a Belgrano. “Venimos entrenándonos muy bien. Va a ser un partido duro y tenemos que ganarlo como sea porque es lo que necesitamos y porque jugamos frente a nuestra gente”, advierte, antes de resaltar que puertas adentro nadie baja la guardia porque la esperanza está más firme que nunca. “Estamos convencidos de lo que queremos y vamos a luchar para conseguirlo. Tenemos que ir partido a partido, tratando de sumar, sin mirar para otro lado ni desviar nuestra atención”, remata Lopes, ese cara de “malo” del fondo “santo” que siempre pone la pierna fuerte cuando la ocasión lo amerita, pero que fuera de la cancha se muestra amable.
Juega Belgrano
Desde las 16:10, Alvarado será local de Belgrano, en un duelo que seguirán de cerca en La Ciudadela. También juegan hoy: Morón-Gimnasia (J) y Temperley-Flandria.
Sesión vespertina
Hoy desde las 17.30, el plantel realizará la última práctica en el estadio. Luego, los convocados quedarán concentrados en el hotel ubicado en la zona del Abasto.