VILNA, Lituania.- El nuevo episodio de la escalada entre Lituania y Rusia por el bloqueo comercial al enclave de Kaliningrado, en el marco de la guerra en Europa del Este, se centra en la amenaza del Kremlin de interrumpir el suministro eléctrico del país báltico.
Lituania respondió que está preparada si Rusia la desconecta de la red eléctrica regional, en represalia por el bloqueo de los envíos ferroviarios de algunas mercancías rusas al ex clave moscovita de Kaliningrado, pero no se espera una confrontación militar, dijo su presidente, Gitanas Nauseda. “Estamos listos y preparados para acciones inamistosas de Rusia (en respuesta), como la desconexión de la red eléctrica”, dijo Nauseda.
El mandatario hizo estas declaraciones después de que el Kremlin advirtió a Lituania de que Moscú responderá a la prohibición del tránsito de mercancías sancionada por la Unión Europea a Kaliningrado de tal forma que los ciudadanos del país báltico sentirían el dolor.
Ahora que las relaciones entre Moscú y Occidente pasan por su punto más bajo desde hace medio siglo, por la invasión rusa de Ucrania, Lituania prohibió el tránsito de mercancías sancionadas por la Unión Europea, a través de su territorio hacia y desde Kaliningrado, citando las normas de sanción del bloque.
Kaliningrado se encuentra entre los miembros de la OTAN Polonia y Lituania y se abastece por ferrocarril a través del territorio de Lituania.
Vilna cerró el viernes la ruta para el transporte de acero y otros metales ferrosos desde la Rusia continental, alegando que tenía que hacerlo en virtud de las sanciones de la UE que entraron en vigor ese día.
Treinta años después de separarse de la entonces Unión Soviética y 17 años desde su adhesión a la UE, los países bálticos -Lituania, Letonia y Estonia- siguen dependiendo de Rusia para un suministro eléctrico estable. Sin embargo, Lituania instaló el año pasado equipos en su enlace con Polonia para conectarse de forma rápida a la red continental europea como póliza de seguro en caso de que Rusia corte el flujo de electricidad, lo que podría provocar apagones.
Un proyecto de 1.600 millones de euros (1.940 millones de dólares) financiado por la UE pretende desconectar a los países bálticos de su red eléctrica común con Rusia y Bielorrusia en 2025 en favor del sistema eléctrico descentralizado de Europa continental. (Reuters )